Para el productor avícola, contar con un galpón refrigerado se ha convertido en una imperiosa necesidad, ya que la alteración brusca de temperatura a causa del cambiante clima complica el confort de las aves, que sufren mucho si no están en un ambiente bien controlado. Dentro de esto también están los factores de ventilación, iluminación, calefacciones, entre otras cosas, pero lograr manejar la temperatura en galpones automatizados asegura la vida de los animales, empezó diciendo el ingeniero Alderete.

Temperatura ideal

Con el sistema de refrigeración, se logra hacer que descienda la temperatura del aire una vez que este pase por el cooling, para así tener un medio más adecuado para los animales. Al nacer, los pollitos requieren de una temperatura más alta que el promedio, aproximadamente 32 a 33 grados centígrados; en la etapa final de su desarrollo (35 días), ellos necesitan temperaturas más bajas, entre 25 a 26 grados centígrados, y esto solo se puede lograr con la refrigeración, destacó.

Es importante mencionar que la ventilación da una sensación térmica por medio de la circulación de aire, pero no desciende la temperatura del ambiente, entonces es muy necesario enfriar el aire que ingresa al galpón a través de la refrigeración.

En caso de que los cooling y extractores de aire estén trabajando al 100% de su capacidad, y aun así no se logra descender a la temperatura deseada, se utilizan aspersores que expulsan neblinas de agua, este sistema es llamado nebulización interna y ayuda en gran medida a bajar la temperatura, mencionó el profesional.

Dos sistemas

Le preguntamos al ingeniero Alderete cuántos sistemas de regulación de temperatura en galpones existen y nos dijo. Existen dos sistemas principales, la nebulización externa y la nebulización interna.

La nebulización externa o cooling se encuentra en la zona de entrada de aire del galpón, el cooling cuenta con una bomba que hace una recirculación del agua por las placas evaporativas en la cual, al pasar el aire por las mismas, reaccionan con la celulosa liberando humedad a través de la evaporación produciendo así aire fresco.

La nebulización interna posee una bomba y sistema de caños que producen una neblina de agua; esta neblina logra un descenso en la temperatura, pero no contacta con el suelo ni con los animales, más bien asciende y es extraída por los extractores, señaló.

En galpones con carpas

El sistema de refrigeración se puede instalar en galpones con paredes de carpa, utilizamos doble capa, una externa y una interna de modo a lograr un cierre hermético y así provechar mejor el sistema de refrigeración.

Lo que se busca en la estructura del galpón, ya sea con paredes o carpas, es un cierre hermético y que exista una sola entrada y una sola salida de aire, destaco el ingeniero.

Generador para asegurar

En nuestro país, los constantes cortes de suministro eléctrico son una realidad, por tanto el productor que instale un sistema de refrigeración debe estar preparado, y la recomendación es adquirir un generador de emergencia para asegurar cualquier imprevisto y que no se den pérdidas en la producción.

En galpones de pared, la importancia del generador radica en la refrigeración. En el caso de los galpones de cortina, también es necesario, solo que en caso de falla energética el encargado podría refrigerar de forma manual, pero por un corto periodo de tiempo.

Desde Nuvetec para nuestros productos Avioeste, venimos trabajando desde hace años en la fabricación de galpones e instalación de sistemas de refrigeración, y a esto le sumamos el acompañamiento a nuestros clientes de tal forma a que logren el resultado esperado, dijo.