En este contexto el informe suministrado por la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina -FADA-, de cómo se compone el precio de un producto clave en la mesa de los argentinos como la carne, arrojó que el consumo de carne de vaca por persona sigue cayendo por tercer año consecutivo, mientras que, por otro lado, somos el quinto proveedor mundial de carne vacuna.


A la fecha del análisis, su precio promedio fue de $372 por kilogramo, de los cuales la cría representa 29% ($108,08), el feedlot el 23% ($83,91), el frigorífico el 5% ($18,09), la carnicería el 14% ($53,26) y los impuestos el 29% ($108,55).

Los costos de la cadena representaron $251,50. Los impuestos sumaron $108,55 y el resultado de la cadena alcanzó los $11,83. De esos impuestos, el 76% son nacionales como el impuesto a las ganancias, IVA, e impuesto a los créditos y débitos, el 19% provinciales como el inmobiliario, ingresos brutos y el 5% municipales como impuesto a la industria y comercio y la tasa vial. A lo largo de la cadena, la etapa de la cría es la que más impuestos paga, seguido por el consumidor. Los mayores costos en las distintas etapas son: en el feedlot y en el frigorífico el animal, y en la carnicería la media res.

Fuente: Diario de Cuyo