La idea con este proyecto es diversificar la matriz productiva de la zona sur de Chile, específicamente en la región de La Araucanía; a través de la producción de almendros, los que, tradicionalmente, se cultivan en la zona centro del país.

Este trabajo, que también contempla la plantación de castaños, pretende analizar desde una perspectiva técnica y comercial la factibilidad de introducción de estos frutales a sistemas intensivos de producción en la zona sur. Además de validar aspectos agronómicos que permitan sustentar algunas recomendaciones futuras para su implementación en la zona.

Se espera que, al tercer año, ya se puedan producir entre 2 mil 500 y 3 mil kilos de pepas de almendras, por cada una de las 8 hectáreas plantada; y cosechar entre 5 a 8 toneladas de castaño. Asimismo, la proyección es vender los productos a los mercados de Estados Unidos y Europa.

Impacto de producción de almendros y castaños en zonas extremas

El director ejecutivo de FIA, Álvaro Eyzaguirre, especificó que “la iniciativa es relevante a nivel regional, ya que pondremos a disposición de los productores un modelo de validación técnico y económico de especies frutícolas promisorias, de alto consumo cotidiano y aconsejable por su valor nutritivo”.

Eyzaguirre agregó que “por lo mismo se desarrolla a escala comercial y cuyos resultados deberán ser difundidos y transferidos; con el fin de promover nuevas alternativas a la matriz productiva de la zona. Es una innovación inédita en Chile que representa el espíritu del proceso de modernización que inició FIA hace dos años”.

De acuerdo con FIA, en Chile, tradicionalmente los almendros se cultivan en la zona centro norte. Sin embargo, producto de los avances en mejoramiento genético logrados principalmente en España; además del cambio climático, surge la posibilidad de modernizar el cultivo en sectores al sur del país.

El investigador de INIA Carillanca, Abel González, explicó a PortalFrutícola.com que la producción de almendros y castaños en zonas extremas sería posible “a través de variedades de floración tardía y autofértiles, que no requieren de polinizantes para la polinización cruzada”.

Asimismo, con respecto al castaño, FIA enfatizó que en la zona sur de Chile existen muchas potencialidades para el desarrollo del castaño tipo marrón; debido a la ausencia aún de plagas y enfermedades de importancia, a los requerimientos mínimos en agua y uso de agroquímicos para su producción, aspectos que deben analizarse en campo y validarlos técnicamente.