Asimismo, el trigo está sufriendo este estrés hídrico y estiman que se tendrán rindes muy bajos. “El clima está muy seco, necesitamos ya de lluvias, porque dentro de unos 30 días empezaremos la siembra de soja y es necesario que el suelo esté húmedo. Se precisa un mínimo de 50 mm de lluvia para estar más tranquilos”, dijo Aurio Frighetto, productor y dirigente de la Coordinadora Agrícola del Paraguay (CAP), filial Alto Paraná. Por otro lado, indicó también que el trigo está sufriendo mucho con esta sequía, pero que se tendrá una cosecha muy buena en calidad, no así en cantidad.

Cristi Zorrilla, presidente de la CAP en Caaguazú, explicó que en estas condiciones de sequía no se puede realizar la desecación de malezas, un paso esencial de preparación de suelo para iniciar la siembra de soja.

Según el último boletín agroclimático del Instituto de Biotecnología Agrícola (Inbio) refiere que seguirá el déficit de humedad en el suelo en setiembre y las escasas precipitaciones, por lo que se teme que corran riesgo los cultivos. Imágenes captadas por el satélite SMOS revelan que se mantienen las condiciones críticas en cuanto al nivel de contenido de humedad, debido a la nula distribución de lluvias sobre todo el país. Los valores más bajos se visualizan en Alto Chaco, Chaco central y en el Bajo Chaco.

Lluvia

Si no se registran precipitaciones de importancia en los próximos 30 días, cuando empezará el inicio de la soja, habría serios problemas.