Tal como sucedió con el maíz, ante un posible aumento de las retenciones a las exportaciones agroindustriales, se aceleró la comercialización de trigo en las últimas semanas en la antesala de una nueva cosecha. Según la Bolsa de Comercio de Rosario en octubre pasado se registraron ventas al exterior por las dos terceras parte de las exportaciones totales del cereal proyectadas para la presente campaña.

Ya son 7,4 millones de toneladas que se comprometieron comercializar al mercado internacional, de un total de despachos proyectado para toda la campaña que va de diciembre 2019 a noviembre 2020 de 11,5 millones. Prácticamente ya está para ser comercializado el 65% del saldo exportable del cereal para el presente ciclo, y donde en los próximos doce meses el trigo disponible para ofrecer al mundo es de apenas 4,1 millones de toneladas.

El informe de los economistas de la bolsa rosarina, también se refiere a la comercialización de trigo en el mercado local. En relación a los años anteriores, la misma no solamente proyecta un volumen más alto sino que hay una mayor concentración entre los meses de noviembre a enero, “abonando la hipótesis de una rápida comercialización de trigo en la nueva campaña a inicios del ciclo comercial”.

A la oferta local restringida, se suma un mercado internacional que está ajustando su proyección de producción global por la falta de precipitaciones en Rusia y Australia, referentes de la producción mundial de trigo.

Las estimaciones del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, entre mayo y octubre de este año, señalan que la producción mundial de trigo cayó 12 millones de toneladas, lo que derivó en una suba del precio del cereal desde finales de agosto y principios de septiembre.

A todo esto los economistas de la BCR comentaron: “En la última semana se han lateralizado ante la falta de noticias frescas en el exterior y la cautela que domina a los negocios en el mercado local por un lado, fruto del proceso electoral en el país y las nuevas regulaciones en los mercados de cambio, y el mejor aspecto que demuestra el cultivo en la zona núcleo argentina luego de la recomposición de las lluvias en el mes de octubre, por el otro”.

Rechazo al posible aumento de las retenciones

A través de un comunicado de prensa, los integrantes de la Confederación de Asociaciones Rurales de la Tercera Zona (Cartez) volvieron a expresar su rechazo “a las políticas que propician la continuidad de las retenciones que pesan sobre productos que el país vende al mundo y que tienen su máxima incidencia en aquellos que provienen del rubro agropecuario”.

Además, manifestaron: “Las retenciones constituyen el peor impuesto distorsivo que asfixia a las producciones generadoras de las divisas que nuestro país necesita de manera imperiosa. En la práctica, y contrariamente a lo que se pregona, las retenciones a las exportaciones han demostrado ser completamente ineficientes como herramienta de remediación de la pobreza estructural que agobia ya a un 40% de los argentinos”.

Frente a este panorama, proponen un sistema impositivo “progreso y equitativo”, que permita contemplar el resultado económico de las diferentes actividades, y posibilite una baja gradual de la presión fiscal que en la actualidad condiciona a las economías regionales, limita a la cadena productiva y frena la generación de fuentes y puestos de trabajo.

Por otro lado, la entidad cordobesa advirtió su eventual oposición “al eventual regreso de viejas y fracasadas prácticas de intervenciones y regulaciones caprichosas de los mercados, ya que dañaron severamente a todo el interior productivo de nuestro país”. Por último, los miembros de Cartez se mostraron dispuestos a dialogar “como camino de construcción de consensos que posibiliten acuerdos sólidos y perdurables, pero no estamos dispuestos a ceder a presiones que busquen hacernos renunciar a nuestros más elementales principios y convicciones”.

En coincidencia con el pronunciamiento del CARTEZ, el último fin de semana se conoció un comunicado de la Sociedad Rural de San Pedro. “Estamos en alerta por la pasividad con la que desde las cabeceras de las entidades ruralistas se mantiene un silencio preocupante, ante la inminente aplicación de medidas de confiscación para productores con la implementación de una medida de incremento de retenciones”, expresaron.

En el comunicado, se reconoce la existencia de una crisis económica que afecta a todos los sectores, y se rechaza la vigencia de los derechos de exportación, “estas herramientas que ya probaron su ineficacia, no pueden regresar sin una reacción contundente de nuestro sector”.

Fuente: Rosario Finanzas