La sostenibilidad es uno de los tres pilares de la Agenda Olímpica 2020 aprobada en 2014, junto con la credibilidad y la juventud. El documento contiene las recomendaciones del Comité Olímpico Internacional para el Comité Organización, sobre como abordar la infraestructura y la geografía natural, la gestión de recursos, la movilidad, la fuerza laboral y el clima, para estar en línea con los objetivos de Desarrollo Sustentable de las Naciones Unidas.

Bajo estas premisas, Tokio se ha propuesto organizar los Juegos Olímpicos más espectaculares de la historia. Según cuentan quienes están cerca de la organización, los asistentes podrán apreciar en en primera persona como será la vida en el futuro. Materiales sostenibles, eficiencia energética, arquitectura bioclimática y transporte ecológico harán que Tokio se convierta en la primera sede en albergar un Juego Olímpico neutro en carbono.

Para los japoneses, la energía de la próxima generación será la obtenido a través del hidrógeno. Y para demostrarle al mundo viabilidad, se han propuesto poner en circulación 40.000 automóviles con celdas de combustibles impulsadas con hidrógeno, 100 autobuses con la misma tecnología y 160 bocas de reabastecimiento. Toyota, empresa responsable de la movilidad de los atletas y del traslado de los espectadores entre los distintos estadios, entregó al Comité Olímpico Internacional en Lausana, Suiza, 8 unidades de su nuevo modelo Mirai -cuyo nombre quiere decir futuro en japonés- impulsado con las celdas de combustibles, que será el vehículo oficial de los juegos. Los buses asignados al evento también serán provistos por firma nipona, que ya dispone del modelo Sora con la misma tecnología que el Miraí. Incluso, hasta los autoelevadores de apoyo estarán equipados con celdas de combustible a hidrógeno.

La energía de la Villa Olímpica, que una vez finalizado los juegos, se convertirá en condominios y departamentos de alquiler para albergar a 12.000 ciudadanos, será generada también con hidrógeno. El biocombustible será producido por electrólisis en la usina solar de Fukushima, intentando mostrar la recuperación del desastre nuclear de 2011. Próximo a la Villa, otro de los proyectos relacionados incluye un hotel, que será el primero en ser alimentado parcialmente por hidrógeno obtenido a partir de plástico reciclado. Un alto funcionario del gobierno de Tokio dijo: «Queremos hacer de la Villa de los Atletas un escaparate para una ciudad de hidrógeno de próxima generación».

Como símbolo de lo que representará el hidrógeno en estos juegos, las llamas de la antorcha olímpica también se encenderán con este combustible. El Comité Organizador está evaluando si lo utiliza para el encendido de la antorcha ceremonial a la luz del sol en Grecia, el origen histórico de los Juegos Olímpicos.

Beijing 2022 no se queda atrás

El distrito de Yanqing de Beijing está acelerando la construcción de dos estaciones de hidrogenación y de una planta de hidrógeno de apoyo para que estén listas para la prueba de la Copa del Mundo de Esquí Alpino de 2020 que se celebrará en China y para los Juegos Olímpicos de invierno Beijing 2022.

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La primera línea de transporte público de energía de hidrógeno se pondrá en marcha en el distrito Yanqing, localizado a unos 75 kilómetros al noroeste del centro de la capital.

El objetivo final es que vehículos de células energéticas de hidrógeno ecológicos, de cero emisiones de carbono y amigables con el medio ambiente transporten a atletas, trabajadores y espectadores entre las sedes.

Beijing emitió un documento a fines de 2017 en el que indicó que promovería la aplicación de la producción de hidrógeno y de tecnología fundamental de hidrogenación en las áreas correspondientes de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Invierno 2022.

Fuente: Bioeconomia