El problema se acentúa con el cese de actividades de fábricas de almidón de la zona, por el resentimiento económico de la región. El Gobierno había prometido buscar un mecanismo para reactivar las industrias y establecer un precio base de la materia prima, sin embargo, hasta el momento no hay respuestas.
El dirigente de la Federación Nacional Campesina, Adrián Vázquez, comentó que los productores tienen millonarias deudas que deben pagar y al no poder comercializar la mandioca ni obtener ganancias, no las pagan, por lo que los intereses aumentan. En varias reuniones realizadas con representantes de Agricultura y Ganadería se prometió ayudar a las fábricas para volver a procesar la mandioca y de proveer a los productores camiones de carga para transportar la materia prima, pero todo terminó en promesas, dijo.
