La mujer rural de la sierra y la selva vienen teniendo cada vez más participación activa en los proyectos productivos que desarrolla el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis), a través delFoncodes.

En total, más de son más de 90 mil mujeres las que trabajan en los proyectos de producción. Un ejemplo son Rosaura Livaque Vásquez y su madre María Consuelo Vásquez Sánchez, quienes viven en Chota, en Cajamarca. Ambas recibieron seis cuyes hembras y un macho y, ahora, tienen más de 200 ejemplares, gracias a la crianza tecnificada.

También se dedican a cultivar hortalizas y venden huevos de gallina. Ellas son un ejemplo de las mujeres de las zonas rurales que han aprendido el manejo de tecnologías productivas con óptimos resultados: manejo de biohuertos, cuidado de animales menores, lideran emprendimientos, venden productos en las ferias locales y regionales, administran mejor el dinero que ingresa al hogar.

Es así que la venta de hortalizas y otros productos permite a las mujeres tener ingresos económicos y, al tener mayor autonomía económica, sienten que “su libertad de elegir y decidir sobre sus vidas” ha mejorado.