Muchas resiembras de soja de segunda, dañadas por el exceso hídrico siguen complicadas, otras se pasaron a maíz de segunda y en otros casos no se harán, según confirmó a El País el Ing. Agr. Marcos Carrera, Gerente de Monsanto.

Aún no está cuantificada el área de sojas de segunda que habrá que resembrar porque fueron arrastradas por las torrenciales lluvias e incluso desde el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca hay algunos monitoreos de la situación.

“Hay muchas resiembras de soja de segunda que no se harán, principalmente por un problema de ciclo del maíz —en caso de que se pasen a ese cultivo—, porque los que se planten a fines de enero se van hasta abril o mayo”, explicó el técnico.

A su vez, los maíces de primera están mostrando desarrollos importantes, pero también hay cultivos de segunda que están muy buenos. “Será un año excelente para el maíz porque ya está con casi todo el rendimiento adentro”, estimó el gerente de Monsanto.

Las sojas de primera no están tan buenas como los maíces, según sostienen los técnicos. “El área de segunda no es tan significativa y por más que no está cuantificada la resiembra final del cultivo, tuvieron muchos problemas”, agregó. Esos cultivos no van a tener los mismos rendimientos que las sojas de primera.

Según Carrera, está todo dado para que sea un buen año agrícola y por lo menos le permitirá a los agricultores seguir pagando cuentas.

“Creo que se tiraron demasiadas campanas al vuelo con el resultado de los cultivos de invierno y aún con un buen rendimiento, el equilibrio en trigo está por arriba de los 4.000 kilos por hectárea. Es un rendimiento muy alto”, reconoció Carrera.

Por más que sea un rendimiento muy bueno, tanto en trigo como en cebada, no sobrará mucho dinero. Lo que permiten esos buenos rindes es que la rueda siga andando y no generar más deudas. “No es que se haga plata, se evita que el muerto no continúe agrandándose”, destacó el gerente de Monsanto.