SAN FRANCISCO.- Una enorme tubería flotante fue remolcada en las aguas de la bahía de San Francisco en el lanzamiento de un gran operativo para limpiar el océano de desechos plásticos.

Ayer fue el día "D" de un proyecto que comenzó en el año 2013 siguiendo la iniciativa del joven holandés Boylan Slat, de 24 años, y que fue denominado "The Ocean Cleanup".

La tubería de 600 metros de longitud en forma de U permitirá atrapar las montañas de basura de plástico que contamina el agua, empezando por la franja del Pacífico situada entre California y Hawai.

El armado del aparato comenzó en marzo en el puerto de Alameda, frente al skyline de San Francisco. Y hoy, tal como estaba programado, fue remolcado más allá del famoso puente Golden Gate hacia mar abierto, a unos 500 kilómetros de la costa.

El objetivo es el remolino de basura del Pacífico norte, conocido también como isla o gran mancha de la basura en ese océano.

La zona se ubica en uno de los mayores giros oceánicos del mundo (un sistema de corrientes marinas rotativas) donde se registran concentraciones muy altas de plástico suspendido y otros desechos atrapados en las corrientes.

Los científicos del proyecto "The Ocean Cleanup" y de distintas universidades hablan de 1,8 billones de partículas de plástico, y eso sólo en la parte más contaminada del Pacífico, que se extiende en una superficie de 1,6 millones de kilómetros cuadros.

El aparato flotante, del que cuelga una especie de telón de tres metros de profundidad en el agua, avanzará por la alfombra de plástico para ir recogiendo la basura.

Después esa basura será trasladada por barcos, una especie de camiones de basura de los mares, a instalaciones en tierra firma donde será tratada, según el proyecto del joven inventor.

El joven tuvo la idea con sólo 16 años, cuando durante un buceo en Grecia se dio cuenta de que en el agua había "casi más plástico que peces". Entonces comenzó a buscar financiación y consiguió los medios y el apoyo de numerosas universidades y empresas para su proyecto millonario. La central del proyecto se ubica en Delft, una ciudad holandesa cerca del Mar del Norte, donde se probaron los primeros prototipos.