Un nuevo informe del bioetanol, elaborado por Claudio Molina, nos demuestra como la situación de dicho combustible está de mal en peor. Las últimas noticias publicadas en el mes de mayo lanzaban titulos como "El Gobierno subió por decreto al 15% las retenciones al biodiésel" y "Otra mala noticia para el biodiésel: Europa analiza nuevos aranceles antidumping".

Si los titulares dejaban al productor totalmente desesperanzado, el contenido de ambas notas eliminaban cualquier ilusión de mejoría. Por un lado, el diario Perfil explicaba que "El incremento del biodiésel se da luego de las versiones de que se analizaba frenar la baja de las retenciones en la soja, hoy con una alícuota del 27,5% para el grano". Por el otro, La Nación detallaba que "Europa teme que se frenen las exportaciones por la mayor alícuota de retenciones y las investigaciones en Europa". Diferentes noticias, distintos países, pero la misma problemática.

Con el arranque de un nuevo mes, se esperaban noticias más alentadoras que aclararan el panorama del bioetanol. Pero lamentablemente, junio llegó más desalentador de lo esperado. "Sube entre un 1% y un 8% el precio de los biocombustibles", titulaba Ecojournal. "El Ministerio de Energía dispuso aumentos para el precio de distintos biocombustibles a partir de hoy. Se trata de los incrementos de 1% en el caso del bioetanol de caña de azúcar, 8% para el producido a base de maíz y de 7% para el biodiesel de aceita de soja", explicaba en el cuerpo del comunicado.

Otro tema muy comentado, fue el comunicado de prensa que envió el Ministerio de Energia a principios de dicho mes: "Comunicamos que como consecuencia de las negociaciones encaradas con los Productores y Refinadores de petróleo crudo y comercializadores de naftas y gasoils en el país, para morigerar el impacto en los precios finales de estos combustibles del incremento de costos de la Industria, particularmente el precio del crudo de referencia internacional BRENT, la tasa de cambio y el costo de los biocombustibles, adicionalmente a la suspensión ya implementada de los aumentos de precios durante mayo, se limitará el traslado a precios de lo mismos durante los meses de junio y julio del corriente año según las pautas que abajo se mencionan".

En el mismo sentido, la página web Surtidores, informaba que un reconocido especial del sector exigía la renuncia del Ministro de Energía. A su vez, exclamaba que "Juan José Aranguren ha fracasado en su gestión y que el traspié más llamativo es la inseguridad jurídica a la que ha sometido a los principales jugadores del sector energético y con ello a toda la sociedad civil". De esta manera, la marea de malas noticias no cesaba.

En el medio del caos, El Intransigente daba a conocer que las ventas del biodiésel habían caído. "El consumo viene cayendo en 2018 por debajo del 10% que establece la ley", acotaba el portal en la bajada de la nota. Como si esto fuera poco, una de las noticias que más impacto tuvo fue la siguiente: "Retenciones al biodiesel y la conveniencia de ampliar los consumos internos". En dicho comunicado, la BCR aseguró que "el Gobierno Nacional dispuso incrementar la alícuota de los derechos de exportación al biodiesel del 8% al 15%. Por lo tanto, la alícuota efectiva pasa del 7,41% al 13,04% sobre el valor FOB del biodiesel. Previendo que esta medida provocará una pérdida de ingresos para los productores locales de biodiesel, se propone considerar medidas que atenúen el impacto".

En lo que va del año, Agrositio se ha encargado de desglosar los diferentes informes sobre el estado del bioetanol, y siempre hemos llegado a la misma pregunta: ¿Podrá remontar su situación el biocombustible?
Estando a tan solo 6 meses de que finalice el año, podemos observar como el panorama no mejora y como la poca esperanza de obtener buenas noticias comienza a desvanecerse.