Los precios del trigo argentino volvieron a subir ayer en el mercado doméstico, en otra clara muestra de la ajustada relación vigente entre las necesidades de la demanda (exportación y molienda) y la disponibilidad de mercadería.

Por tonelada de trigo con entrega inmediata los exportadores pagaron ayer 230 dólares para el puerto de Bahía Blanca, 10 dólares más que anteayer. El mismo valor, equivalente a 4613,80 pesos, fue ofrecido para las terminales del Gran Rosario, frente a los 4500 pesos vigentes en la rueda precedente. La mejora fue de 5 dólares para Necochea, donde el grano fino se cotizó a 225 dólares por tonelada.

Así, la necesidad que evidencian los exportadores para completar envíos o para garantizarse una porción de lo poco que va quedando de la cosecha 2017/2018 sigue alimentando el incremento de los precios, que resulta próximo al 70% desde los 2700/2800 pesos vigentes a mediados de noviembre pasado.

En su informe sobre la carga de buques programada, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) indicó que entre el 18 del actual y el 6 del mes próximo deben salir desde las terminales del Gran Rosario 257.880 toneladas de trigo; desde Bahía Blanca, 117.500 toneladas, y desde Necochea, 54.900 toneladas.

Respecto de los molinos, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) informó que pagaron entre 4350 y 5300 pesos por tonelada de trigo, según calidad, procedencia y forma de pago.

En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), la posición julio del trigo aumentó US$1,20 y cerró con un ajuste de 248 dólares por tonelada. El contrato enero, que marca el ingreso formal de la nueva cosecha, se mantuvo estable, en 193 dólares por tonelada.

En los Estados Unidos, el persistente mal estado de los suelos en Kansas, el principal estado productor de trigo, posibilitó ayer un repunte de los precios. En la Bolsa de Kansas, los contratos mayo y julio del cereal sumaron US$2,38 y 2,48, mientras que sus ajustes fueron de 181,97 y de 189,05 dólares.

Tiempo de cosecha

Por tonelada de soja, las fábricas ofrecieron ayer 5950 pesos para las entregas sobre el Gran Rosario, 50 pesos menos que en la rueda anterior. Con el avance de la cosecha sobre el 39,6% del área apta, según el informe semanal de la BCBA, la remisión de mercadería a las terminales y la necesidad de muchos productores de cubrir con ventas necesidades financieras les restaron sostén a los precios de la oleaginosa.

En el Matba, las posiciones mayo y julio de la soja aumentaron US$ 0,30 y terminaron la jornada con ajustes de 316,50 y de 323 dólares.

Las pizarras de la Bolsa de Chicago mostraron quitas de US$1,65 y de 1,57 sobre los contratos mayo y julio de la soja, cuyos ajustes resultaron de 381,13 y de 385,44 dólares por tonelada. La tónica negativa comprendió también a la harina, que bajó US$3,64 al terminar la rueda con un valor de 411,49 dólares.

Acerca del maíz, los exportadores pagaron ayer 185 dólares por tonelada para Bahía Blanca y 180 dólares para Necochea, sin variantes, mientras que para la zona del Gran Rosario ofrecieron 3650 pesos, 50 menos que anteayer.

La BCBA informó que los consumos pagaron entre 3250 y 4000 pesos por tonelada de maíz seco, según calidad, procedencia y forma de pago de la mercadería.

En el Matba, las posiciones abril y julio perdieron US$1 y cerraron con ajustes de 188 y de 186 dólares.

Los contratos mayo y julio del maíz en Chicago bajaron ayer por quinta rueda consecutiva, al perder US$0,39 y 0,29, sus ajustes resultaron de 150,39 y de 153,93 dólares.