El informe del USDA de ayer no dejó nada librado a la imaginación. Lejos de intentar mostrar una disparidad entre los datos arrojados y los precios actuales como suele suceder últimamente, el reporte presentó en los valores, el reflejo de todo lo que contenía en su concepción.

Sin duda, los valores de oferta y demanda para soja y maíz en Estados Unidos fueron más bajistas que lo que todos esperaban, el aumento en los rendimientos y pocos cambios en la demanda para soja, sumada a la reducción de la misma para maíz y trigo. Integran como resultado una montaña de granos y oleaginosas en Estados Unidos y también en el mundo. En conclusión, el resultado del reporte, fue la cifra record de 522 mill de toneldas de stocks, de los 3 principales productos. Y sin ir más lejos CONAB informó que Brasil producirá 184 mill de t de maíz y soja en su conjunto.

El último resquicio de esperanza en las cifras, fue el recorte de las existencias mundiales de soja, debido al aumento en las importaciones Chinas. Y aumento en las exportaciones de soja de Brasil y Argentina. Si bien el USDA incrementó la estimación de exportaciones de USA, parece un poco optimista sabiendo que se lleva comercializado un 22% menos que el año pasado en esta época.

Ahora bien, con la fuerte baja en los precios en el día de ayer, se observó mucha fijación de precio de parte de muchos usuarios finales, que sin saber si estos son los pisos, entienden que los presupuestos deben cerrarse y los embarques deben realizarse. Sin embargo, por precaución, muchas de las compras de físico y futuros, fueron acompañadas por compras de opciones puts o combos con equivalente función. Esto si es administración de riesgos, en todo su esplendor.

Para el farmer estadounidense, que se encuentra con toda la cosecha casi lista, los rangos de precios quedaron fuera de los gatillos de ventas; y sin rallies parece que continuarán almacenando el producto. Es así que las fábricas están previendo una molienda lenta de cara a los festejos de fin de año. La pregunta que nos hacemos es si creemos que esto es suficiente para movilizar los mercados.

En el corto plazo, los puntos de referencia para localizar los movimientos de los precios, los comandará la fortaleza del dólar, los fondos cortos en soja, pudiendo promover un short covering, el clima en Sudamérica y la evolución de los cultivos.

Sin descartar que el mundo descuenta en sus precios que Argentina puede volcar al mercado mucho producto en los próximos meses de cara el cambio de gobierno.

Los argentinos ven posible un brote de exportaciones instantáneas? De no ser así el mercado puede llevarse algunas sorpresas?

No nos confundamos, adelantémonos a los acontecimientos y pensamos en un nivel de más largo plazo. Vienen tiempos de cambios y hay que dejar todo acomodado, para que cuando las oportunidades inunden nuestro país estemos preparados para tomarlas.

Y vos, estás en buenas manos para administrar tus riesgos? o continuar adivinando precios seguirá alcanzando?

Por Celina Mesquida, RJO´Brien - Especial para AgroEducación