Guillermo Moreno volvió a abrir las exportaciones de maíz y las grandes multinacionales cerealeras acudieron en su ayuda en un momento en el que el Gobierno intenta frenar la presión sobre el dólar paralelo.
En apenas 24 horas, los exportadores agrupados en la Cámara de la Industria Aceitera-Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-Cec) presentaron pedidos de Registros de Operaciones de Exportación (ROES) de este cereal por 1,3 millones de toneladas. En plata se trata de mercadería valuada en unos US$ 400 millones que ingresarán como divisas para el país y al liquidarse, el Gobierno podrá usar en un contexto de escasez de dólares.
FERVOR EN COMERCIO INTERIOR
Anteayer, el secretario de Comercio Interior amplió el saldo exportable de la actual cosecha de maíz en 2 millones de toneladas. Así, de 15 millones de toneladas se estiró a 17 millones de toneladas. Se tomó esa decisión con el dato del Ministerio de Agricultura de que la producción del cereal alcanzará un récord de 25,7 millones de toneladas.
Del cupo de los 2 millones de toneladas, 1,4 millones de toneladas fueron precisamente a parar a las empresas asociadas a Ciara-Cec. Mientras tanto, otras 600.000 toneladas fueron para la Cámara Argentina de Productores y Exportadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco), cuya creación fue promovida por el funcionario.
Ayer, en un encuentro que Moreno mantiene todos los viernes con referentes del mercado de carne vacuna, el funcionario estaba exultante. Dijo que a las 9 los grandes exportadores ya habían presentado solicitudes para exportar un millón de toneladas. Más tarde, le llegó el dato de que ese volumen había aumentado a 1,15 millones de toneladas. Finalmente, el día cerró con pedidos de autorización presentados por 1,3 millones de toneladas.


