WASHINGTON.- Senadores norteamericanos situaron a la Argentina entre los países que tienen "una larga historia en poner obstáculos" a las empresas de EE.UU. que quieren operar allí. También la situaron, junto a Ecuador, entre los países que ponen en duda los fallos del tribunal arbitral del Banco Mundial (Ciadi).

Esto formó parte de un debate en la Comisión de Finanzas del Congreso, en el que se analizaron las posibilidades de Estados Unidos para que terceros países "acaten las normas internacionales" con las que establecen negocios bilaterales. Las expresiones corrieron por cuenta de senadores demócratas y republicanos, y fueron hechas en presencia del nuevo jefe de la Oficina del Representante Comercial (USTR, por sus siglas en inglés), Demetrios Marantis.

Uno de los más críticos fue el senador demócrata por Nueva Jersey Robert Menendez, titular del Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara. Menendez quiso saber qué hace la USTR con países como la Argentina, que "aplican medidas discriminatorias y limitaciones para acceso al mercado" y que tienen "una larga historia de poner obstáculos a las empresas norteamericanas".

El republicano Orrin Grant Hatch alzó la voz para poner a la Argentina en la misma línea de conducta de Ecuador respecto de los fallos del Ciadi, a los que Quito ignora. Para el senador por Utah es "esencial" respetar la "disciplina" de los acuerdos internacionales que dan garantía a las inversiones, por lo que consideró "intolerable" su no cumplimiento.

Hatch dijo que el "comportamiento" de Ecuador en materia de acuerdos de inversión constituye un ejemplo "emblemático" de los desafíos que EE.UU. tiene en la región con países como "Venezuela, Argentina y Cuba". Las preguntas de ambos senadores apuntaron a lograr un "compromiso" por parte de Marantis, en su condición de nuevo titular interino del USTR en reemplazo del saliente embajador Ron Kirk. El ex directivo fue quien escribió el informe sobre la Argentina, en el que luego se basó el presidente Obama para "suspender" beneficios arancelarios a nuestro país como represalia por haber obrado "de mala fe" al ignorar fallos del Ciadi. Y su oficina elaboró después el expediente con el que se denunciaron las modificaciones al sistema de licencias automáticas de importación que impuso el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno. Marantis puso ayer como "ejemplo" el modo con que su oficina reaccionó a esas disposiciones que "afectaban importaciones" de empresas norteamericanas.

Las críticas expresiones de los legisladores y la promesa de rigor de la USTR se suman al informe del Departamento de Estado en el que, semanas atrás y por primera vez, la administración norteamericana previno sobre un deterioro en el clima de inversión en el país, como consecuencia de medidas del gobierno de Cristina Kirchner.