En comunicación exclusiva de Agrositio con el Director Ejecutivo de la Cámara Argentina de Fruticultores Integrados (CAFI), Marcelo Loyarte, se analizó la situación de retanbilidad actual del sector.
“El sector está teniendo un aumento importante en los costos y algunos agravantes de la situación financiera a partir de dificultados con los cobros de reintegro. Según el Ministerio de Agricultura de la Nación junto con el Ministerio de Economía, los gobiernos provinciales y el sector privado, hicieron un estudio que relevó un crecimiento del 12% de los costos en dólares”, aseguró Loyarte.
Asimismo, el Directoe ejecutivo agregó: “Por suerte aproximadamente en julio o agosto Brasil dejó la posibilidad de que le importemos productos. A partir de ahí, se comenzó a liberar un poco más las importaciones. La situación cambió mucho en relación a unos meses atrás. El 25% de la producción de Río Negro es destinado al país vecino”.
“El gran desafío sigue siendo producir con costos crecientes. Las expectativas para la campaña 2013 está en lo financiero para poder encarar una temporada más”, afirmó Marcelo.
La Federación de Productores de Frutas de Río Negro y Neuquén apuntaron a la “incertidumbre” de los productores “por la falta de políticas que permitan recuperar la rentabilidad perdida”.
En un documento público señaló que “no podemos esperar más” y puntualizaron entre los reclamos medidas estructurales que permitan alcanzar un precio mínimo de referencia que cubra el costo de producción. Además que se den a conocer públicamente las conclusiones del “Observatorio de la Actividad Frutícola”.
Pidieron además un aporte monetario para tareas culturales (raleo, control sanitario, etc) con el fin de llegar a la próxima cosecha con fruta de calidad y medidas compensatorias para hacer frente el “alto costo laboral”.
Piden el “cese inmediato de las intimaciones y/o ejecuciones por parte de la AFIP y la implementación de planes de pago acordes con las posibilidades de los productores”.
La Federación aseguró que “el productor este año va a recibir en promedio entre 0, 88 y 0,90 centavos kilo entrado por báscula sin clasificación. Y tiene un gasto para producir esa fruta de 1,20 sin amortizaciones, sin tener en cuenta que el productor tiene que vivir de eso y sin tener en cuenta la posibilidad de poder volver a trabajar”.
Al respecto, el Presidente de la Federación de Productores de Fruta de Río Negro, Jorge Figueroa, afirmó que “si uno analiza todo el esquema, tienen que empezar diciendo que este modelo económico no nos ha permitido recuperar los grandes costos internos que tenemos. La cadena en su totalidad no tiene competitividad”.
El informe encargado por la Asociación de Productores y Exportadores de Frutas Frescas de Mendoza (Aspeff) advierte sobre la “importante contracción que ha sufrido esta actividad en los últimos 14 años, que se manifiesta en la pérdida de casi 12.185 hectáreas implantadas con frutales con destino principal al consumo en fresco, lo que representa una caída de casi el 41%”.

Aspeff, señaló que esta situación de crisis no se generó de manera espontánea. Los ingresos brutos reales del sector han mostrado una tendencia decreciente que varía según la especie frutícola considerada. Excepto el durazno, todas las frutas registraron fuertes pérdidas de valor, en algunos casos desde la salida de la convertibilidad y, en otros, desde el rebrote inflacionario partir de 2007.
El estudio hace hincapié en que la disminución de la rentabilidad provocó en los últimos 14 años la pérdida del 41% de la superficie cultivada y la destrucción de más de la mitad del valor bruto de la producción. En efecto, en ese lapso hubo una pérdida de casi 12.185 hectáreas implantadas con frutales con destino principal al consumo en fresco.
En cuanto a la Unión Europea, la World Apple and Pear Association, prevé un 8% menos en la producción de manzanas y un 31% menos de peras.
De acuerdo con la World Apple and Pear Association, WAPA, la cosecha proyectada para manzanas y peras sufrió un ajuste al mes de noviembre de 2012. De esta forma, la producción total de manzanas de la EU-27 será de 9,600 mil toneladas para el año comercial 2012, lo cual refleja una disminución de un 8% con respecto a lo reportado en 2011.
Estudio de costos de producción de peras y manzanas
El próximo martes 4 de diciembre, en el marco de la reunión de la Mesa de Contractualización Frutícola, se presentará el Estudio de Costos de Producción de manzanas y peras, elaborado por profesionales del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y de la facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional del Comahue (UNC).
A la reunión, que se realizará desde las 12 hs en la Secretaria de Fruticultura ubicada en la localidad de Allen, fueron invitados representantes de CAFI, CINEX, Federación de Productores de Fruta de Río Negro y Neuquén y, legisladores integrantes de la Mesa.
Cabe señalar que la Ley Nº 3.993 de Contractualización fue sancionada en septiembre de 2005 con la finalidad de definir cada temporada los costos de la fruta de pepita.
Exportación de frutas de pepita
El presidente de la Asociación de Productores y Exportadores de Frutas Frescas de Mendoza (Aspeff), Juan Riveira, es productor, empacador y exportador de frutas de pepita, estima que "el 90% de la manzana que se erradicó en Mendoza, durante los últimos 10 años, no se repuso". En este sentido sostiene que hoy en la provincia hay un déficit de producción de manzana de 200 millones de kilos, considerando la demanda tanto en el mercado interno como en el exterior. Este volumen correspondería aproximadamente a unas 5.000 hectáreas de montes, calculando una producción promedio -de calidad comercial- de unos 40.000 kg/ha, que es el objetivo planteado.

Va más allá inclusive al decir que "es posible que a la Argentina le estén faltando 400 millones de kilos". Fundamenta su estimación en que "de lo que hay en el Alto Valle de Río Negro y Neuquén, probablemente tengan que erradicar el 60%, porque no es de la calidad que hoy exige el mercado", según comunicó el portal “Losandes”.
"De hecho, hace dos años se comenzó a abandonar montes de baja calidad; y este año esa tendencia se ha profundizado, no sólo por eso, sino por problemas de rentabilidad, que hacen todavía más grave la situación de plantaciones que no sean de primerísima calidad", agregó Riveira.
"Quienes nos dedicamos a la fruta en fresco en Mendoza, empezamos a trabajar -en el mejor de los casos- en el mes de noviembre; llegamos a marzo con el fin de la cosecha de pera y de frutas de carozo y no tenemos más nada para hacer", señala el presidente de la Aspeff. Con lo cual, "a partir de abril y hasta noviembre, tenemos galpones de empaque sin trabajo; cámaras frigoríficas vacías y la manzana daría para trabajar el resto de la temporada".
“La manzana tiene otras características las cuales le permiten que se pueda guardar en frío sin procesar y se puede ir trabajando durante todo el invierno, no como la fruta de carozo y la pera, que hay que trabajarlas en el momento de la cosecha", detalla el productor.
En el acumulado enero - setiembre 2012 se exportaron 115.196.428 kilogramos de manzanas, lo que representa un 42% menos que los 197.726.234 exportados en igual periodo de 2011. Las cifras del mercado de peras, en igual periodo, alcanzaron en 2012 los 356.286.006 de kilos, lo que equivale a un 18% menos que los 437.802.703 de 2011.
Desde la Cámara Argentina de Fruticultores Integrados (CAFI) informan que los citados problemas de exportación, más los aumentos de los costos que superan el 20%, generaron en la industria pérdidas mayores a los 70 millones de dólares.
Otro problema que destacan es que la industria no es formadora de precios (por el contrario es tomadora) y la caída en la rentabilidad se pone en evidencia al analizar que hace diez años se necesitaban exportar 29 cajas de frutas para pagar el salario promedio del sector, cifra que hoy llega a 70 cajas.
¿Qué ocurre con las importaciones de fruta de pepita?
En mayo de este año, los productores frutícolas mendocinos comenzaron a notar las repercusiones de la decisión del gobierno de Brasil acerca de frenar el ingreso de productos argentinos.
Si bien la “traba” se disparó para la uva en fresco al detectarse un cargamento proveniente de San Juan contaminado con la plaga Brevipalpus chilensis, la aplicación se extendió también la manzana, con la aplicación de licencias no automáticas de importación y nuevos controles fitosanitarios.
15.000 familias viven de esta actividad
Alrededor de 15.000 familias (entre productores, empacadores y empleados) viven en forma permanente de la producción y empaque de fruta para consumo en fresco en Mendoza. Ello, sin contar los contratados para trabajos temporarios ni el alcance hacia otras actividades.

En efecto, entre las más de 4.000 explotaciones primarias que producen fruta para consumo en fresco y los 226 galpones donde se la acondiciona para derivarla a los mercados, emplean a 10.500 personas en forma permanente y contratan, aparte, casi 1.850.000 jornales por año para realizar tareas de poda, raleo, cosecha, selección y empaque. Aparte de eso, hay que considerar los empleos indirectos, en otras actividades que proveen de insumos, productos y servicios, sin olvidar la actividad comercial alimenticia y de indumentaria que no es dato menor.
Estos números son muy significativos en algunas de las regiones de la provincia. Se estima que en el Valle de Uco el 33,4% (1 de cada 3) puestos de trabajo son generados por la fruticultura con destino a consumo en fresco. Mientras que, en la región Sur, este porcentaje alcanza a 11,3%.
Director Ejecutivo de la Cámara Argentina de Fruticultores Integrados (CAFI)- Marcelo Loyarte


