En Villa General Güemes, una localidad del Departamento Patiño, al sudeste de la provincia de Formosa, a 281 km de su capital, se denunció el taponamiento del riacho El Porteño y el desvío de su curso mediante un canal hacia un campo particular, lo que deja sin agua a la localidad.
 
El sacerdote Ángel Tetamanzi contó el caso al diario La Mañana de Formosa. "Cae de maduro que nadie se tiene que quedar con el agua de todos", dijo. Asimismo, agregó que fue hasta el lugar junto a la Policía y el concejal, Jorge Rojas, para constatar lo planteado. El lugar del corte y desvío está a unos 15 kilómetros de Güemes siguiendo el riacho hacia el norte.

El padre Tetamanzi alegó que, si bien no tiene detalles del responsable, conoce que por ley no se pueden desviar cursos de agua, como en este caso. “Cuando llegamos, vimos que taponaron el riacho y lo desviaron hacia la derecha y además por una alcantarilla lo hicieron cruzar la ruta provincial que va desde Estanislao del Campo a San Martín Dos para hacerlo llegar a un campo donde hay animales”, describió.

La policía de la Unidad Regional (UR) 6 de General Güemes, dijo que existía un expediente que fue remitido a la jefatura de la Unidad Especial de Asuntos Rurales (UEAR).

Según trascendidos de los pobladores, el responsable sería “un hombre con mucha plata y poder en la provincia, que hizo un desvío muy grande en el riacho El Porteño”.

El drama de la sequía en la región

La preocupación por la sequía que castiga a la zona es grande, y con el taponamiento del riacho se complica el panorama. El padre Tetamanzi dijo que sería importante destapar el riacho porque en todos los días que estuvo bloqueado, el agua se fue acumulando. De abrirse el curso, toda esa agua llegaría a la localidad, trayendo algo de tranquilidad a la población.

“Desde donde el riacho está taponado, hasta Güemes hay 15 kilómetros y de la localidad hay otros 40 kilómetros hacia ‘abajo’ (el sur) donde hay campos y animales”, asegura el sacerdote.

Luego recordó la recientemente aprobada ley que establece como de dominio público a todos los reservorios de agua de la provincia, independientemente de su ubicación o extensión, lo que incluye al ricacho El Porteño.