Los precios de la soja cerraron ayer con importantes bajas en la Bolsa de Chicago, donde los operadores parecieron tomar conciencia (con una rueda de atraso) del aumento de la cosecha estadounidense estimado anteayer por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, en sus siglas en inglés) en su reporte mensual. En efecto, el organismo elevó de 71,69 a 77,84 millones de toneladas el volumen de la campaña 2012/2013.
Al cierre de los negocios, las pizarras de la plaza estadounidense mostraron quitas de US$ 9,55 y de 9,74 sobre los contratos noviembre y enero de la soja, cuyos ajustes resultaron de 559,43 y de 559,24 dólares por tonelada. El movimiento bajista fue liderado por los fondos de inversión especuladores, que liquidaron contratos y retiraron ganancias tras las subas de la jornada anterior.
Vale señalar que las subas registradas por la soja durante la rueda del jueves tuvieron mucho que ver con la corriente alcista del maíz y con un nivel de existencias estimado por el USDA en 3,53 millones de toneladas, un volumen que, si bien resultó superior al de septiembre, de 3,13 millones, continúa siendo uno de los más bajos históricos.
Sin embargo, para llegar a esa cifra, el organismo elevó un 20% su previsión de exportaciones estadounidenses, de 28,71 a 34,43 millones de toneladas de soja, un volumen que parece extremadamente optimista si se tiene en cuenta la competencia que la mercadería de los Estados Unidos tendrá a partir de marzo cuando comience a ingresar al mercado la oferta de América del Sur, que se prevé récord.
Entonces, en la medida que el clima se mantenga favorable para los cultivos de Brasil y de la Argentina, para quienes el USDA proyectó anteayer cosechas de 81 y de 55 millones de toneladas, respectivamente, le será más difícil al organismo sostener el saldo exportable estadounidense en los 34,43 millones estimados en su informe mensual, incluso a pesar del crecimiento previsto de las importaciones de China, que crecerían de 59,50 a 61 millones.
Así, los precios actuales continúan siendo muy altos frente a la potencial entrada de 150 millones de toneladas de soja durante el segundo trimestre de 2013.
En el mercado local, la tendencia bajista externa se reflejó en las pizarras del Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), dado que las posiciones noviembre y mayo de la soja perdieron US$ 7,80 y 4,90, mientras que sus ajustes resultaron de 401 y de 328,90 dólares por tonelada.
La plaza disponible, en tanto, registró un muy reducido movimiento, dado que los compradores no estuvieron dispuestos a sostener los precios de la víspera y los vendedores no estuvieron interesados en aceptar valores por debajo de los $ 1850 por tonelada, esto último más por la añoranza de los casi 2000 pesos vigentes pocas semanas atrás que por un concienzudo análisis del escenario por venir.
La única oferta abierta durante la jornada la hizo la misma cooperativa que anteayer pagó hasta $ 1900 por tonelada de soja para Timbúes. En esta ocasión comenzó el día con una propuesta de $ 1880, para bajar hasta $ 1850 cuando la tendencia bajista externa se consolidó. Sin embargo estos valores sólo estuvieron vigentes para cooperativas y acopios.
Acerca de la soja de la nueva cosecha, en la zona de Rosario las propuestas se ubicaron entre 320 y 328 dólares, por debajo de los 330 dólares de anteayer. En Bahía Blanca la oleaginosa se cotizó a US$ 320, con una baja de 10 dólares.
Ayer, en EE.UU. también cayeron los precios de los cereales. En efecto, la posición diciembre del maíz perdió US$ 8,85 y terminó la rueda con un valor de 295,56. En el caso del trigo, el contrato diciembre en Chicago y en Kansas bajó US$ 10,75 y 10,20, mientras que su ajuste resultó de 314,80 y de 327,11 dólares.
En el mercado local de maíz, los exportadores ofrecieron US$ 197 por tonelada en Lima y US$ 195 en San Martín y en Arroyo Seco, US$ 3 por debajo de los valores vigentes el jueves.
Respecto del trigo, se cotizó a US$ 240 en Bahía Blanca, con una baja de 10 dólares. En la zona de Rosario, el rango propuesto por los exportadores fue de 210 a 250 dólares, según el momento de entrega.


