Untitled Document

“En los próximos 4 años, queremos que el 20% de nuestras ventas provengan del negocio de semillas, vs el 10% de hoy en día”. Así lo expresó Sandra Peterson, CEO de Bayer Cropscience en una conferencia de prensa  realizada la semana pasada en Monheim Alemania,  que contó con la presencia de Agrositio.

La empresa alemana que ya tiene una presencia importante en los mercados de colza, algodón y hortalizas en Norteamérica, Europa y otros mercados, decidió hace un par de años ingresar también al mercado de semillas de soja.

En Junio de 2011 adquirió la empresa brasileña de mejoramiento de semilla de soja SoyTech Seeds ingresando de esta forma al mercado latinoamericano. Bayer apunta a tener un 15% del mercado brasileño de semillas de soja para el año 2020.

En la Argentina, la empresa se encuentra en este momento evaluando diferentes alternativas de inversión en semilleros locales.

La intención es desarrollar fuertemente opciones de germoplasma que se adapten a las condiciones del mercado argentino y la incorporación de eventos biotecnológicos desarrollados por la empresa, como por ejemplo la tecnología Liberty Link (resistencia al herbicida glufosinato de amonio).

 “Mirando hacia el futuro, los pilares de Bayer estarán basados en productos químicos, productos biológicos y semillas, tanto germoplasma como eventos biotecnológicos” indicó Ruediger Scheitza, responsable de Estrategias de Bayer CropScience.

“Queremos ofrecerle al productor agrícola soluciones integradas e innovadoras que cubran el mayor espectro de sus necesidades, desde el tratamiento de sus semillas, elección de la mejor genética y la protección del cultivo” agregó R. Scheitza.

En ese sentido Bayer ha invertido fuertemente en los últimos años en el desarrollo de sus Centro de Formación en Tratamiento de Semillas (STAC por sus siglas en inglés). Recientemente la compañía ha inaugurado 3 unidades en Latinoamérica: México, Brasil y Argentina (ubicado en la localidad de Chacabuco). Bayer apunta a convertirse en el principal referente en tecnología de aplicación para el tratamiento de semillas y su enfoque se centra en el proceso de semillas de soja, trigo, maíz y girasol.

El STAC sirve como centro para transferencia de conocimientos y tecnologías, capacitación para productores, cooperativas agrícolas, empresas de semillas y multiplicadores.

La empresa cuenta con 10 STACs en el mundo, localizados en América del Norte, América Latina, Europa, Asia y Oceanía.

Matthias Haug, responsable del Negocio de tratamiento de Semillas, destacó que Bayer se encuentra un una posición inigualable  ya que tiene la posibilidad de ofrecer una solución integrada en tratamiento de semillas. “Tenemos excelentes fungicidas e insecticidas – tanto de origen químico como de origen biológico, contamos con avanzada tecnología en recubrimiento de semilla y una amplia gama de equipos de aplicación de la línea Gustafson, indicó M.Haug.

Con ventas a nivel mundial de 7.255 millones de Euros y 21.000 empleados, Bayer CropScience apunta a seguir creciendo fuertemente y en particular en sus operaciones latinoamericanas. Para conseguir estos objetivos, la compañía ha establecido un plan de inversiones para el período 2011-2016 de EUR 5.000 millones en investigación y desarrollo y de EUR 2.000 millones en sus plantas de producción y de procesamiento de semillas.

“Apuntamos a liderar el desarrollo e implementación de soluciones sustentables para cultivos”, destacó Sandra Peterson, CEO de Bayer CropScience

Esta gran inversión responde a la estrategia que Bayer CropScience lanzó hace un año y que se basa en cuatro pilares fundamentales: 1) rejuvenecer su negocio principal de protección de cultivos; 2) reforzar la atención al cliente a lo largo de toda la cadena de creación de valor; 3) reorientar la innovación; y 4) ampliar el negocio de semillas de la empresa.

Durante la conferencia de prensa, Peterson destacó: “Nuestra estrategia de cuatro pilares ha transformado la compañía y sentado las bases para el éxito futuro. Hemos racionalizado nuestro portfolio y reequilibrado su composición acelerando al mismo tiempo el potencial de las nuevas tecnologías. Todo ello desempeña un papel destacado en nuestro planteamiento para impulsar el futuro de la agricultura”.

Además, subrayó que la empresa está bien situada para impulsar el futuro de la agricultura aprovechando las oportunidades que hay en la actualidad: “Aspiramos a marcar la pauta en soluciones sostenibles para los cultivos, e invertiremos con fuerza en I+D y en capacidad de producción a fin de satisfacer la demanda mundial de soluciones diferenciadas para cultivos”.

Por su parte, C. David Nicholson, jefe de Investigación y Desarrollo de Bayer CropScience, manifestó que “con sus profundos conocimientos en ámbitos de semillas y soluciones químicas y biológicas, la firma ocupa una posición única en la agroindustria. Nuestro objetivo es desarrollar soluciones integradas para cultivos que aporten a los agricultores un paquete completo de productos y servicios para todo el ciclo del cultivo, desde plantar las semillas hasta conseguir que su cosecha llegue fresca y en perfectas condiciones a los comercios minoristas”.

Cabe destacar que durante el pasado mes de agosto, Bayer CropScience cerró su adquisición de la empresa estadounidense de control biológico de plagas AgraQuest, una operación de casi 500 millones de dólares con la que consolida su presencia en el mercado de los plaguicidas biológicos, que según las previsiones triplicará su volumen hasta acercarse a los 4 millones de dólares en 2020.

Latinoamérica representa un aproximadamente un 24,8% del total de ventas de la empresa, y de acuerdo a la empresa, la expectativa de crecimiento en la región es muy positiva y estará relacionado al crecimiento de sus productos actuales, nuevos productos que estarán lanzando al mercado y en particular al ingreso en el mercado de semillas de soja en Brasil y Argentina.