Pese a todos los controles que inventó, la inflación sigue vivita y coleando y está entre las más altas del mundo.

El INDEC, que supo gozar de prestigio internacional por la calidad de sus estadísticas, ahora lo perdió por todo lo contrario: la manipulación grosera de las cifras.

Intervino en el mercado de granos y consiguió que hoy haya menos trigo que en 1983 y que se frenara el empuje del maíz . Y entró en la papelera Massuh para reanimarla y lo que logró fue convertir el producto en un papelón: la empresa no existe más .

Los éxitos continúan: este año se producirá sólo 2,48 millones de tn de carne y se exportará menos de 250.000 tn, números que están entre los más bajos de la historia (Ver: Efecto Moreno: 2011 fue uno de los peores años para producir carne).

Por primera vez, la Argentina tiene la carne vacuna más cara del continente. Es consecuencia de un violentísimo proceso de liquidación de existencias. Del 2007 al 2010, el rifle sanitario de Moreno achicó el stock en nada menos que 10 millones de cabezas.

También por primera vez, el consumo ha caído por debajo de 50 kilos por habitante, 20 menos que hace 5 años . Las exportaciones son la mitad del año pasado y otros competidores vecinos, como Brasil y Uruguay, nos han desplazado en el mercado internacional.

Varios de los platos que rompió Moreno los pagó el gremio de la carne bajo la forma de cierre de frigoríficos y pérdida de fuentes de trabajo. Ellos y los que no son del gremio: hoy la carne cuesta promedio US$4,5 contra US$1,5 histórico. Los únicos beneficiarios de semejante zafarrancho han sido los escasos ganaderos que quedaron en pie.

Con estos resultados, cualquiera pensaría que un secretario de Comercio así sería degradado y no ascendido. Pero avanzó sobre el Central, Industria, la Cancillería y la Aduana.

Su valor reside en que está siempre listo para apretar . Dónde y a quién sea.