Frente a estas debilidades, APROCAL ha decidido crear, en convenio con la Subsecretaría de Lechería de la Nación, la Escuela de Chequeadores de Máquinas de ordeñar.

Frente a la necesidad de un instrumento permanente de capacitación que llegue a todos los técnicos en actividad nació la Escuela de Chequeadores de Máquinas de ordeñar, una propuesta ambiciosa de APROCAL (Asociación Pro Calidad de leche y sus derivados) -en convenio con la Subsecretaría de Lechería de la Nación- que implicó traducir por primera vez al español el curso de la Universidad de Wisconsin, Madison, a cargo del Dr. Douglas Reinemann. Autoridad mundial en máquinas de ordeñar y coordinador de la materia ante FIL/IDF, National Mastitis Council y representante de Estados Unidos ante las normas ISO, Reinmann viajó al país para entrenar a quiénes serán los futuros instructores locales: Marcos Bontá, Dante Grangetto y Martín Pol. Aquí, algunos avances de lo que fue el encuentro y de lo que será la futura Escuela de Chequeadores.

CAPACITACIÓN EN ATALIVA

En la capacitación que se llevó a cabo el 21 y 22 de junio en la Escuela de Ataliva, provincia de Santa Fe, también estuvieron presentes en calidad de auditores, representantes de distintas empresas locales y multinacionales. "Fue una experiencia enriquecedora. Tener a disposición durante dos días a una persona como Reinemann, que tiene un conocimiento enorme sobre todo en lo que es el correcto funcionamiento de la máquina de ordeño, fue una oportunidad única", destaca Ricardo Sojo, representante de GEA. "En el encuentro se logró que cada uno se sacara la camiseta de su empresa y charlara abiertamente para ver qué se puede lograr a través de este curso para mejorar la lechería y las instalaciones de la máquina de ordeño", agrega. Martina Dadomo de Delaval, por su parte, resalta: "Es muy importante que todas las empresas hayan participado porque nos permitió estar en la misma página. Fue muy interesante porque pudimos no sólo ver la parte práctica sino además establecer los parámetros para el curso que van a realizar los técnicos en el futuro y darle la importancia que se merece a cada una de las áreas de los chequeos", aseveró. "El nivel de la capacitación fue muy bueno pero por sobre todo destaco el objetivo del curso que es poder crear una escuela de chequeadotes que certifique y estandarice los controles de los equipos de ordeño", asegura en tanto Pablo Siri, representante de Boumatic. Otro de las empresas que también estuvo presente fue Rodeg. "La experiencia fue muy buena porque se dieron cita prácticamente todos los fabricantes y empresarios del rubro de ordeño. A pesar de la trascendencia de que haya venido Reinemann, era necesario que estemos todos juntos para aunar criterios respecto de la modalidad de chequear equipos de ordeño. Este es el punto de partida para que de una manera normalizada, consensuada y criteriosa podamos evaluar la calidad del ordeño", puntualiza Saul Degano, representante de la firma.

LA ESCUELA

La capacitación que ofrecerá la Escuela de Chequeadores se articula sobre una plataforma web que permitirá al alumno cursar los módulos a la velocidad que desee y, una vez aprobados los distintos capítulos, pasar por la experiencia práctica que se realiza periódicamente en la Escuela de Ataliva. "Además de tener normas actualizadas, necesitábamos que los técnicos aplicaran en el campo esas normas de una manera consistente", señala Martín Pol, futuro instructor de la escuela. Allá por el 2006, después de la tradicional Jornada APROCAL, un grupo de técnicos de la entidad, del INTA y fabricantes de máquinas de ordeño llegaron a un consenso general de la necesidad de estandarizar y normalizar la actividad. Fue Miguel Taverna, del INTA, quien planteó que se debían actualizar las normas IRAM en base a las normas ISO vigentes. Los fabricantes de equipos acordaron que las normas ISO eran la base que todos debían cumplir, y un grupo de técnicos empezaron a participar activamente de las reuniones en IRAM y se fueron traduciendo las normas ISO. Desde ese momento -recuerda Pol- los técnicos comenzaron a tener normas IRAM sobre las cuáles trabajar. Pero la idea de crear una escuela nacional empezó a tomar forma en 2009. Ese año, APROCAL invitó al Dr. Douglas Reinemann y a Pam Ruegg, ambos profesores del Instituto Babcock de la Universidad de Wisconsin, a realizar un curso para técnicos y veterinarios. Luego de ese encuentro -explica Pol- se dieron cuenta que necesitaban crear un espacio para poder hacer llegar permanentemente esa capacitación a todos los técnicos en actividad. Es así como en 2009, tras el convenio entre APROCAL y la Subsecretaría de Lechería de la Nación, se concretó la idea de crear una escuela para "brindarles a los productores lecheros herramientas claras y consistentes que les permitan tomar decisiones acertadas sobre equipos de ordeño". EL CONVENIO El subsecretario de Lechería, Jorge Arturo Videla, junto al Director Nacional de Planificación Estratégica, Roberto Socin, y la Comisión Directiva y de Tecnología de Ordeño de APROCAL, en conjunto con todas las marcas de ordeñadoras presentes en el mercado argentino, trabajan en el convenio que tiene como objetivo: - Puesta en vigencia de las normas IRAM para diseño, armado, regulación y control de equipos de ordeño. - Planilla única de chequeo de equipo de ordeño y estandarización del informe técnico para el productor. - Calibración de los instrumentos de medición para los controles de los equipamientos de ordeñe. - Desarrollar la escuela de controladores de equipamiento de ordeñe. - Realización del prueba piloto de chequeo de tambos pequeños y medianos en zonas definidas.

Andrea Palombo