Los precios de la soja cerraron ayer con altibajos en el mercado disponible local. Las ganancias fueron para la oleaginosa de la próxima cosecha, mientras que el retroceso lo registró la mercadería con entrega inmediata. En la Bolsa de Chicago, en tanto, hubo bajas para la soja y subas para el trigo y el maíz.
Por tonelada de soja disponible, las fábricas pagaron $ 1310 en las terminales de Timbúes, San Martín, San Lorenzo, Ricardone, Villa Gobernador Gálvez y en General Lagos, $ 10 menos que anteayer. La exportación ofreció $ 1320 sólo en Arroyo Seco. La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) indicó ayer que durante la rueda hubo rumores de que "por lotes importantes y diferentes condiciones de pago y entrega el precio pudo llegar hasta los $ 1330 por tonelada".
La soja de la próxima cosecha se negoció a 322 dólares en Bahía Blanca y a 317 dólares en Necochea, con mejoras de 2 dólares. La suba fue de un dólar en San Martín y en Arroyo Seco, donde los exportadores pagaron 321 dólares. Las fábricas mantuvieron su propuesta estable, en 320 dólares, sobre General Lagos, Timbúes y sobre San Martín.
En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), las posiciones septiembre y noviembre de la soja retrocedieron US$ 1 y 1,40, mientras que sus ajustes fueron de 327,50 y de 332,50 dólares por tonelada.
Las pizarras de la Bolsa de Chicago, mostraron ayer quitas de US$ 2,66 y de 3,12 sobre los contratos agosto y septiembre de la soja, cuyos ajustes resultaron de 505,51 y de 504,04 dólares por tonelada. La posibilidad de lluvias en las zonas productoras de granos gruesos estadounidenses fue uno de los fundamentos bajistas de la rueda. A él se sumaron la apreciación del dólar respecto del euro (la relación pasó de 1,4515 a 1,4363) y la caída del valor del petróleo (de 99,59 a 97,40 dólares por barril).
El retroceso de los principales indicadores bursátiles, en medio de la crisis financiera que comprende por igual a la Unión Europea y a los Estados Unidos, también hizo ayer su aporte a la debilidad de las cotizaciones de la soja.
Maíz y trigo
En el mercado de maíz local, los exportadores pagaron 170 dólares por cereal con entrega en septiembre sobre Timbúes, sin cambios.
Por maíz de la próxima cosecha, con descarga entre marzo y abril, la demanda pagó 175 dólares por tonelada en San Martín, 5 dólares más que anteayer. La mercadería con entrega de abril a mayo sobre San Martín y sobre Arroyo Seco se mantuvo estable, en 175 dólares. Ayer también hubo una propuesta por cereal para julio de 2012: 175 dólares en Timbúes.
En su reporte diario, la BCR relevó ventas por 6000 toneladas de maíz 2010/2011 y por 15.000 toneladas de grano de la próxima cosecha.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires indicó que los consumos pagaron entre 169 y 172 dólares por maíz con entrega de agosto a diciembre sobre Baradero y entre 160 y 162 dólares en Chacabuco, por cereal con descarga de septiembre a diciembre.
En el Matba, las posiciones diciembre y abril del maíz subieron US$ 1 y 0,70, mientras que sus ajustes fueron de 175 y de 176 dólares por tonelada.
Los contratos septiembre y diciembre del maíz en Chicago aumentaron US$ 0,69 y 1,87, en tanto que sus ajustes coincidieron en 272,23 dólares por tonelada. La posibilidad de que la cosecha estadounidense resulte inferior a la previsión sostenida por el USDA en su informe de julio (342,15 millones de toneladas) fue determinante para que el cereal terminara ayer la rueda con saldo positivo.
Acerca del trigo, los exportadores locales ofrecieron ayer US$ 180 por tonelada disponible sobre Bahía Blanca con un ph mínimo del 78%. En Necochea, el cereal con hasta 9,5% de proteína se mantuvo en 160 dólares. No hubo ofertas por mercadería de la próxima cosecha.
En el Matba, las posiciones septiembre y enero del trigo subieron US$ 2 y 2,50, mientras que sus ajustes fueron de 172 y de 174,50 dólares.
El contrato septiembre del trigo en Chicago y en Kansas aumentó US$ 3,95 y 2,84, en tanto que su ajuste resultó de 258,95 y de 289,63 dólares.
Por girasol la demanda pagó $ 1320 en Rosario y en Junín, $ 1195 en Necochea, y $ 1190 en Bahía Blanca.


