Los precios de la soja acentuaron ayer su caída en el mercado disponible local y copiaron así la tendencia negativa de los negocios concertados en la Bolsa de Chicago, donde el balance de la semana dejó pérdidas significativas, sobre todo para los cereales.

Por tonelada de soja con entrega inmediata, tanto fábricas como exportadores ofrecieron ayer 1250 pesos en las terminales de San Lorenzo, San Martín, Villa Gobernador Gálvez, Timbúes, Ricardone, General Lagos y de Arroyo Seco, 20 pesos menos que anteayer. El mismo retroceso se registró en las operaciones hechas para descarga durante agosto, dado que los interesados propusieron 1270 pesos.

Frente a la caída de las cotizaciones, los compradores desistieron ayer de hacer ofertas por soja de la próxima cosecha en las terminales ubicadas sobre el río Paraná. En Bahía Blanca y en Necochea la oleaginosa se negoció a 312 y a 307 dólares por tonelada, con bajas de 3 dólares.

En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), las posiciones julio y noviembre de la soja retrocedieron US$ 2,50 y 3, mientras que sus ajustes fueron de 316 y de 325,50 dólares por tonelada.

Las pizarras de la Bolsa de Chicago mostraron ayer pérdidas de US$ 6,44 y de 6,06 sobre los contratos julio y agosto de la soja, cuyos ajustes resultaron de 489,79 y de 489,98 dólares por tonelada. En el balance de la semana, estas posiciones resignaron un 3,91 y un 3,53%, tras cerrar el viernes anterior con valores de 509,73 y de 507,89 dólares, respectivamente.

"Estas pérdidas de la soja respecto de la semana anterior no responden a que se haya modificado proyección alguna en forma relevante, es decir que no se trata de un cambio de tendencia. Debemos tener muy en claro que es necesario que la producción estadounidense, que recién está en la etapa final de la siembra, deje como resultado efectivo un volumen cercano a los 90 millones de toneladas, porque, de lo contrario, la relación entre la oferta y la demanda será muy ajustada", explicó Adrián Seltzer, de la corredora Granar SA.

El analista añadió que durante la semana el mercado sojero sufrió la influencia bajista del maíz, del trigo y del petróleo, además de la revaluación del dólar frente al euro y el temor por la crisis financiera existente en la Unión Europea (con epicentro en Grecia). "Todos factores que empujaron a los fondos de inversión a liquidar parte de sus posiciones especulativas", dijo Seltzer.

Maíz y trigo

En el mercado de maíz local, la exportación volvió a hacer ofertas por cereal de la vieja cosecha. La propuesta fue de 170 dólares por tonelada de cereal con entrega en agosto sobre San Lorenzo. En Bahía Blanca, el maíz nuevo, con entrega entre mayo y junio, se cotizó a 175 dólares, sin variantes.

Los consumos, por su parte, pagaron $ 720 por tonelada de maíz en Gualeguay; $ 700 en Baradero y en Clason, y $ 660 en Chacabuco.

En el Matba, las posiciones julio y abril del maíz perdieron US$ 4,50 y 4, mientras que sus ajustes fueron de 170 y de 176 dólares por tonelada.

La posición julio del maíz en Chicago bajó ayer US$ 0,49 y quedó con un ajuste de 275,68 dólares, en tanto que el contrato septiembre subió US$ 0,99 y finalizó la jornada con un valor de 270,46 dólares. En el balance semanal, estas posiciones cayeron un 11,02 y un 9,13%, tras cerrar el viernes pasado con ajustes de 309,83 y de 297,62 dólares, respectivamente.

Acerca del trigo, la demanda volvió a ofrecer 190 dólares por tonelada con baja proteína y entrega inmediata sobre Necochea. En el Matba, las posiciones julio y enero del cereal perdieron US$ 4,50 y 0,20, mientras que sus ajustes fueron de 172,50 y de 188,30 dólares.

En Chicago, la posición julio del trigo bajó US$ 0,37 y cerró con un valor de 247,01 dólares, en tanto que en Kansas, el mismo contrato aumentó US$ 2,38 y terminó la rueda con un ajuste de 295,60 dólares. En el balance semanal, ambas plazas acumularon pérdidas del 11,46 y del 7,32%, tras terminar el segmento anterior con precios de 278,98 y de 318,94 dólares, respectivamente.

Por último, el girasol se negoció ayer con valores estables, dado que la demanda pagó $ 1460 por tonelada en Rosario, Ricardone y en General Deheza; $ 1335 en Necochea, y $ 1330 en Bahía Blanca. El precio FOB del aceite en los puertos argentinos pasó de 1300 a 1310 dólares.