Mientras siguen subiendo las estimaciones de cosecha de soja argentina crecen los ingresos potenciales de los chacareros y los del Gobierno, por la vía de las retenciones, pero también, la amenaza de un nuevo colapso logístico en los puertos de la zona del Gran Rosario, por donde sale cerca del 80% de la producción granaria nacional.
La semana pasada ya se verificaron algunas demoras en el acceso a puertos del norte de la zona portuaria santafesina, y pese a que desde la Sociedad Gremial de Acopiadores de Granos indicaron a El Cronista que se trató de un hecho aislado, los transportistas y empresarios cerealeros están preocupados. Es que aún faltan 10 días para que comience el período de mayor tránsito a los puertos.
Según datos de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) el promedio de ingreso de camiones a los puertos de la zona (desde Timbúes hasta San Nicolás) de los últimos cinco días alcanzó los 6.279 diarios, frente a los 5.624 a misma fecha del año pasado. En lo que va del año, ingresaron 222.437 camiones a dichos puertos, lo que implica un aumento de 12% respecto a igual período de 2010.
La Bolsa de Comercio de Rosario elevó su proyección para la soja hasta las 49,7 millones de toneladas que, junto a las 19,5 millones de toneladas de maíz que se espera producir, conforman cerca de las tres cuartas partes del total de la producción nacional. Y ambos granos coinciden en su período de siembra, entre mediados de marzo y mediados de junio. Por las demoras de los camiones la semana pasada se celebró una reunión entre representantes del Centro de Corredores de Cereales de Rosario, la Cámara de la Industria Aceitera (Ciara) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC) para analizar el problema. Como primera medida, pidieron a los acopiadores que no carguen camiones sin cupo es decir, por debajo de lo permitido, para no ocasionar demoras innecesarias en los puertos.
El crecimiento paulatino de la cosecha argentina de los últimos años dio un salto en la campaña 2006/07 y mantiene cifras récord desde esa temporada en adelante, exceptuando la cosecha 2008/09, signada por la sequía.
Especialistas de distintas entidades, especialmente de la BCR vienen alertando desde hace tiempo sobre los problemas estructurales de los puertos rosarinos e inclusive, planteando soluciones, sin éxito todavía por el fuerte financiamiento que se requiere de las arcas nacionales.


