La primera rueda de negocios de la semana en la Bolsa de Chicago dejó un claro saldo negativo para el trigo, el maíz y la soja. En la visión de los operadores, el aumento del petróleo, generado por la crisis política y social que atraviesa el mundo árabe, atenta contra el comercio global de materias primas, dado el encarecimiento de los fletes. Este fue el principal argumento bajista de la jornada.

El trigo fue el producto más golpeado por la tónica negativa, en parte debido a que la zona en conflicto (norte de Africa y Medio Oriente) es uno de los bloques que mayor demanda del grano fino concentra. Los contratos mayo y julio del cereal en Chicago perdieron US$ 11,63 y 10,95, mientras que sus ajustes fueron de 294,17 y de 305,05 dólares por tonelada. Las pizarras de la Bolsa de Kansas mostró bajas de US$ 11,06 y de 10,57 sobre los mismos contratos, cuyos ajustes resultaron de 330,11 y de 333,63 dólares.

Respecto de la soja, las posiciones marzo y mayo en la plaza estadounidense retrocedieron US$ 7,40 y 6,99, mientras que sus ajustes fueron de 509,86 y de 512,57 dólares por tonelada. La leve apreciación del dólar respecto del euro; el avance de la cosecha de soja en Brasil, y la continuidad de un clima favorable para los cultivos en la Argentina sumaron presión bajista para la oleaginosa y le dieron motivo a lo fondos para operar como vendedores.

Acerca de la producción de soja en América del Sur, los operadores prevén que el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, en sus siglas en inglés) eleve pasado mañana, en su nuevo informe mensual de oferta y demanda de granos, su estimación de cosecha en Brasil hasta los 70 millones de toneladas, desde los 68,50 millones previstos en el reporte de febrero.

En cuanto al maíz, los contratos marzo y mayo perdieron ayer en la Bolsa de Chicago US$ 4,03 y 4,17, en tanto que sus ajustes resultaron de 279,91 y de 282,43 dólares por tonelada. Si bien la suba del petróleo (pasó de 104,42 a 105,44 dólares) tiene como efecto colateral el aumento del valor de los fletes, para el maíz tiene un costado potencialmente alcista. Ocurre que cada vez que el barril supera determinados límites (actualmente está en el nivel más alto desde septiembre de 2008), las energías alternativas son miradas con mayor atención, tal el caso del etanol, que puede ser obtenido del maíz.