Pagina nueva 1

Las retenciones agropecuarias continúan dividiendo a la oposición. Casi todos los bloques coinciden en que el Congreso es el que debe fijar un nuevo esquema, máxime porque el 24 del actual vencen las facultades del Gobierno para hacerlo. Pero lo cierto es que priman las diferencias sobre la conveniencia o inconveniencia de segmentar las alícuotas, según el producto y la envergadura del productor.

La UCR fijó una postura, pero aún resta definir algunos detalles importantes. La propuesta del radicalismo consiste en rebajar a cero las retenciones para las economías regionales y carne, mientras que para otros cultivos, como trigo, maíz, sorgo y girasol, se establecería una reducción de la alícuota (aún no está definido el porcentaje) y segmentación según cantidad de toneladas producidas.

En una sintonía similar se muestran los bloques del Partido Socialista, mientras que el Peronismo Federal también se muestra partidario de una segmentación, pero sólo de la soja. En cambio, la Coalición Cívica insiste con reducir a cero todos los cultivos menos la soja, que propone bajarla del actual 35 al 25 por ciento.

Los bloques de la centroizquierda no son partidarios de bajar las alícuotas que gravan los cultivos, sino de establecer una segmentación. Por su lado, los bloques cercanos al oficialismo, como Nuevo Encuentro, de Martín Sabbatella, insisten en que es el Poder Ejecutivo el que debe fijar las retenciones agropecuarias. "Son una herramienta fundamental de la política económica y de gestión, y debe ser el Poder Ejecutivo el que tenga la facultad de fijarlas. El Congreso no tiene posibilidad de fijar derechos de exportación a cada producto, al ritmo que impone el intercambio internacional", consideró el diputado Sabbatella.