Actuando como trampolín, los precios de todos lo granos se elevaron.

La molinería del trigo pagó $ 730, gluten mínimo 26 y PH 76. Respecto al trigo de la próxima campaña, entrega diciembre/enero 2011, la exportación operó sobre un valor de u$s 200 por tonelada.

Los problemas en Europa, y más precisamente, en Rusia se están complicando cada vez más. En este país se estima una rebaja en la producción del orden del 25%.

La preocupación llegó a la esfera política. Es así que las autoridades rusas están estudiando tomar medidas de mayor intervención en los mercados, lo que pone mayor confusión.

Los daños en el oeste de Kazajstán y el este de Ucrania, así también, son visibles y la incertidumbre sobre los resultados finales es grande.

Para peor los pronósticos climáticos son desfavorables en la región.

En este cuadro, los fondos apuestan fuerte. Por ello, acentúan las subas que vienen de la mano de una demanda nerviosa por los problemas de existencias que podrían darse en caso de agravarse la situación. Se prohibirían, momentáneamente, las exportaciones de este cereal de Rusia.

Distintos operadores ya están contemplando considerables reducciones en la estimación que el Consejo Internacional de Cereales hiciera hace unos días, en su informe mensual, sobre la producción global de trigo 2010/11 de 651 millones de toneladas.

Ya no parece disparatado pensar en apenas 640 millones de toneladas, con stocks finales menores a 185 millones de toneladas. Y si la baja no resulta menor es por el buen comportamiento de la producción norteamericana.

En este contexto, los precios de los demás granos se ven favorecidos. Así, la soja cobra protagonismo.

Pero guarda… que lo que hoy es un salvavidas verdadero no pase a ser uno de plomo.

Acá está lo difícil: saber manejar los tiempos. El clima es caprichoso; a veces ayuda a los precios y otras, los debilita.