En un contexto económico y político diferente al vivido por el sector ganadero en los últimos años, La Rural abrió sus puertas y cumple, como cada año, con el objetivo de mostrar y trasladar a la cadena agropecuaria los últimos avances tecnológicos disponibles.
Distinto al de otros años es también el ambiente que se percibe entre los productores de las principales razas, quienes, entusiasmados con la recuperación en los precios de la hacienda, se hicieron presentes en Palermo con expectativas renovadas y genética de punta.
El recorrido por la muestra y sus distintas pistas es siempre interesante, al igual que el diálogo con los representantes de las asociaciones de criadores, los cuales han unificado su mensaje en cuanto a la necesidad de presentar animales que se adapten a las diferentes regiones y sistemas productivos de nuestro país, a fin de recomponer los stocks e incrementar la producción actual de carne y leche.
En este sentido, Angus se encuentra presente en esta 124° exposición con 580 ejemplares provenientes de todo el país (un 20% más que en 2009).
Ocupando prácticamente la mitad del Galpón Amarillo del predio, cien cabañas muestran sus mejores exponentes. “El biotipo de estos animales permite su desempeño en los distintos esquemas de producción locales, respondiendo a diferentes condiciones climáticas y calidades forrajeras”, comentó el nuevo director ejecutivo de la Asociación Argentina de Angus, Juan Pablo Hornos.
Cabe recordar que más de la mitad de los bovinos del país lleva sangre de esta raza, la cual en esta edición de La Rural presenta animales de sobresaliente fertilidad y aptitud materna, gran precocidad sexual y productiva, alta capacidad de crecimiento y muy buen rendimiento al gancho, indicó el especialista La calidad es el más importante de los atributos buscados por aquellos interesados en invertir en reproductores. Esta situación es reconocida por el director ejecutivo de la Asociación Braford Argentina, Juan Baqué, quien destaca el nivel de los 110 animales de la raza presentes en la muestra.
“Hemos logrado un biotipo que se caracteriza por su alta producción aún en condiciones ambientales adversas, lo que se traduce en mayor eficiencia de conversión de pasto en carne, mayor resistencia a enfermedades, menor selectividad al pastoreo, reconocida fertilidad, facilidad de parto, habilidad materna y longevidad. Esto hace del Braford una herramienta clave para la producción ganadera, tanto en las zonas marginales del Norte, como en la Pampa Húmeda y la precordillera”, agregó.
La posibilidad de acceder a distintos mercados también es un punto a tener en cuenta por los interesados en incorporar genética a sus rodeos.


