El creciente desborde de los precios de algunos productos hizo reaparecer con todo al secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, quien intenta volver a presionar a los formadores de precios, aunque existen dudas sobre el ²poder de fuego² actual del polémico funcionario. La cadena cárnica y los empresarios textiles recibieron una invitación para una reunión en el día de hoy. Ya mantuvo un encuentro con los avícolas y azucareros.

La política de control de precios aplicada por el Poder Ejecutivo a partir del protagonismo de Moreno no pudo evitar que la inflación real promediara el 20 % anual en los últimos dos años, según las principales consultoras privadas.Por ello, la estrategia del “palo” instrumentada por Guillermo Moreno, el polémico secretario de Comercio Interior de la Nación, podría ser complementada ahora por herramientas más sofisticadas, que buscarían incrementar la oferta de productos mediante líneas de apoyo crediticio, uno de los temas en los que está trabajando la flamante titular del Banco Central, Mercedes Marcó del Pont.Moreno citó para este viernes a industriales textiles y referentes del mercado cárnico, con el objetivo de pedirles que bajen los precios.Se espera incluso que allí distribuya una “lista de precios sugeridos”, que pondrá especial énfasis en los cortes de la carne vacuna.Inspectores de la secretaría de Comercio Interior saldrían a partir de la semana próxima a recorrer carnicerías con el fin de verificar el cumplimiento de esos precios.En especial se concentrarán en cortes populares como asado, carnaza, carne picada, rosbif, vacío, falda, nalga, entraña, paleta, osobuco y hueso con carne.

PRESUPUESTO. El caso de la carne es el que más impactó sobre el presupuesto de los argentinos durante enero y febrero, con cortes populares que se dispararon por encima del 30 %.La carne subió el 60% en los últimos dos meses: el 40% durante enero y otro 20% a fines de diciembre. Los frigoríficos continúan comercializando las medias reses a $ 15 en las carnicerías porteñas, $ 2,5 más que hace quince días.De los 50 mil animales que entran por semana en períodos normales, ingresaron al Mercado de Liniers solo 35 mil durante enero. Los especialistas sostienen que el gobierno debería trabajar con mayor empeño en robustecer el stock vacuno, que sólo en la provincia de Buenos Aires cayó en tres millones de cabezas en los últimos dos años. El secretario de Comercio ya se reunió con los azucareros, industriales avícolas y de la prepaga Galeno, dueña de los sanatorios de la Trinidad y una de las más importantes del país.A todos les dijo lo mismo: “Hay que moderar las subas de precios”, peor está en duda si le harán caso.Un dato que preocupa al gobierno es que el proceso inflacionario no se detuvo siquiera en el 2009, donde el nivel de actividad sufrió un fuerte enfriamiento por la crisis financiera mundial.Sí, como estimó la presidenta Cristina Kirchner, la economía argentina crecería un 5 por ciento este año, esta mayor demandan podría presionar aún más sobre los precios.

TOPES. Según trascendió, en su diálogo con los empresarios Moreno habría buscado poner topes para los ajustes de precios.En el caso de la industria avícola, Moreno les planteó que, a diferencia de 2009, cuando el permiso de suba para el producto más básico fue de 9%, en 2010 esa autorización será de 7%. Para los pollos especiales, del 14%, y para los premium, del 18%. En todos los casos, el año pasado el Gobierno les había autorizado dos puntos porcentuales más.Pero en una economía de mercado fijar topes más propios de regímenes dirigistas tiene resultado incierto sobre su efectividad.Además, los empresarios le vienen advirtiendo al gobierno que sus costos e insumos también vienen sufriendo fuertes ajustes.En casi todas las reuniones, los empresarios mencionaron la preocupación por el alza de los costos, en gran parte, influenciado por la puja distributiva que se avecina. Por la fuerte reducción de la oferta ganadera, los precios de la carne en la góndola se dispararon hasta 40 por ciento, lo que generó, consecuentemente, una merma en el consumo que en algunos casos llega al 30 por ciento.Es en este marco que el ministro de Economía, Amado Boudou, debió admitir que la Argentina sufre un “proceso inflacionario” y reconoce que “existen problemas en productos determinados” por la escasez de oferta.Los precios de la canasta básica de alimentos crecieron en promedio 8,5 por ciento en la primera quincena de febrero con respecto a igual período del mes anterior, de acuerdo con un relevamiento efectuado por Consumidores Libres.La entidad precisó que ese porcentaje surgió después de haber relevado el valor de 38 productos alimenticios, en supermercados y centros de abastecimiento barriales de Capital Federal y Gran Buenos Aires.

SUBA. De este modo, la suba de la canasta básica de alimentos llegó al 10,7 % en solo un mes y medio de 2010, alertó Consumidores Libres.En un comunicado, la entidad precisó que los productos que más subieron de precio en la primera quincena de este mes, fueron la manzana y la bola de lomo (ambos con casi el 30 por ciento) y el pollo, con el 28 por ciento.Además, puntualizó que los que más redujeron su valor fueron el zapallo (14 por ciento), pan común (10) y polenta (3).Por su parte, el aceite comestible y las tapas para empanadas no registraron variaciones en sus precios.