En la próxima campaña se implantará menos si se sigue “por este camino”, alertó la Bolsa de Comercio de Rosario. Para esa entidad “es difícil” que en el ciclo venidero “se pueda cosechar más del 50% de la producción que se obtiene este año” porque “se desalienta la siembra de trigo por todas partes”. La producción podría “no alcanzar” para abastecer el consumo interno, avisó la BCR.

La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) advirtió que desde el primero de diciembre último no se conocen compradores interesados en el trigo y alertó que “por este camino” el año próximo no habrá producción triguera en la Argentina.
“Siempre se puede estar peor y lo peor que puede pasar y vamos por ese camino es que el próximo año vuelva a caer la siembra del cereal y la producción no alcance para abastecer el consumo interno”, sostuvo el informe.
Así lo consignó en su último informe al señalar que “la semanas pasan, continúan celebrándose reuniones entre el Gobierno y los distintos sectores del campo pero los resultados de las mismas no se reflejan en el mercado”.
“En Rosario, desde el 1 de diciembre no se conocen compradores interesados en realizar negocios sobre el cereal aunque en otras plazas hay precios pero poco representativos de un mercado al que todos puedan acceder”, expresaron los analistas de la BCR.
También consideraron que “peor aún estamos cuando de las últimas reuniones se desprenden medidas que discriminan a los productores y confirma al secretario de Comercio Interior como el determinante en la política oficial en materia de granos”.
Las últimas medidas para reactivar el mercado son las siguientes, según el organismo:
1) Ampliar la apertura de registros de exportación de trigo en 1.000.000 toneladas adicionales (incluyendo las 300.000 ya anunciadas para Entre Ríos y las 250.000 para los puertos de Quequén y Bahía blanca).
2) Compromiso de los molinos harineros de comprar 1,5 millones de toneladas.
3) Implementar un mecanismo de devolución de retenciones a pequeños y medianos productores de trigo y maíz (medida anunciada en septiembre por la presidenta Cristina Kirchner pero que se pondrá en práctica recién en marzo).
“Las compras que realizarán la molinería y los exportadores serán a pequeños y medianos productores que estarán incluidos en unos listados “aprobados previamente”, continuó el informe.
En la exposición que se realizó en la reunión el ministro de Agricultura señaló que “sobre un total de 29.500 productores de trigo, 27.000 son chicos y medianos, otros 800 son medianos y medianos grandes, y el 7 % restante —que tiene el 50% de la producción— son grandes”.
De este razonamiento se desprende que el 93% de los productores producen la mitad de la cosecha de trigo mientras que el otro 50% es producido por productores que no entrarían en las disposiciones de negociación establecidas por el Gobierno, añadió.
“Así es difícil que el año próximo se pueda cosechar más del 50% de la producción que se obtiene este año ya que se desalienta la siembra de trigo por todas partes”, sostuvo la Bolsa.