La menguante producción de materias primas, desde el arroz hasta la leche, es una mala noticia para todos excepto para los inversores.
El arroz podría subir un 63% a US$1.038 la tonelada desde US$638 por las importaciones de Filipinas y la escasez en India, según un sondeo de Bloomberg entre importadores, exportadores y analistas. El Gobierno de Estados Unidos dice que la leche en polvo desnatada podría subir un 39% el año próximo, y JPMorgan Chase & Co. pronostica un incremento del 25% en el azúcar. El costo mundial de los alimentos subió un 7% en noviembre, el mayor incremento desde febrero de 2008, cuatro meses antes de tocar un récord, según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
Este año los precios de los productos agrícolas se rezagaron con respecto a los futuros del cobre, que subieron al doble, y al incremento del 57% en el petróleo. Una recuperación de la peor recesión desde la Segunda Guerra Mundial impulsó la demanda de alimentos y los costos para los compradores de materias primas, como el procesador de leche Dean Foods Co. Asimismo, el número de personas que pasan hambre, que según la ONU rebasa los 1.000 millones, aumentó.
“Las materias primas agrícolas serán una fabulosa inversión en los próximos tres o cinco años”, dijo Oliver Kratz, que administra US$10.000 millones como director de inversiones estratégicas temáticas mundiales para DB Advisors de Deutsche Bank AG en Nueva York, incluso US$3.000 millones en agricultura. Para quienes no puedan pagar más por comida, existe un “doloroso” riesgo de pasar hambre, añadió.
El crecimiento demográfico y los mayores ingresos han impulsado el consumo en China e India. La demanda de leche en China está recuperándose luego de que suministros nacionales contaminados con melamina, un químico utilizado para fabricar plásticos, mató a seis bebés e hizo que más de 300.000 se enfermaran. La sequía en la India y Argentina y los tifones en Filipinas han reducido la producción.
EXISTENCIAS
Las existencias de maíz y arroz caerán antes de la cosecha de 2010 por primera vez en tres años, según datos del Departamento de Agricultura de Estados Unidos. La Organización Internacional del Azúcar pronostica un segundo déficit mundial consecutivo de suministro en el año que concluye en septiembre de 2010, y el Departamento de Agricultura de Estados Unidos pronostica que las existencias del azúcar bajarán al menor nivel desde 1995.
“La tendencia en los precios de los alimentos es alcista, no bajista”, dijo el 11 de diciembre el responsable ejecutivo de Unilever, Paul Polman, en una entrevista con Bloomberg Television en Copenhague. Unilever, con sede en Rótterdam y Londres, la mayor empresa de productos de consumo masivo después de Procter & Gamble Co. en Cincinnati, fabrica el té Lipton, la mayonesa Hellmann y las salsas Bertolli. “Necesitamos asegurarnos de tener el suministro de alimentos, de no desperdiciar y de conseguir medios cada vez más eficaces de hacer llegar esa comida a los consumidores”, dijo Polman.
El riesgo de una aceleración en los precios podría verse mitigado por los “saludables” incrementos en las existencias, como en el caso del trigo, según la FAO. Los suministros en los almacenes son suficientes para satisfacer alrededor del 23% de la demanda mundial, en comparación con el 19% hace dos años, dijo la semana pasada la FAO. Las existencias “son mucho más cómodas” que durante la crisis del año pasado, dijo la agencia de la ONU.
El costo de los alimentos subió a un récord en junio de 2008 porque el trigo, el maíz, el arroz, la avena, la soja, el pienso y el aceite de cocina alcanzaron máximos históricos. Indonesia, Argentina e India restringieron el comercio para proteger los suministros, según la ONU. La escasez desencadenó unos 60 disturbios desde Haití hasta Filipinas antes de que la crisis mundial de crédito y la recesión hicieran caer los precios.
Algunos suministros alimentarios ya están cayendo. La producción mundial de arroz se ha rezagado con respecto a la demanda en cuatro de los últimos ocho años, según datos del Departamento de Agricultura de Estados Unidos. Se espera que el creciente consumo erosione las existencias un 41% a 85,9 millones de toneladas en el año de comercialización 2009- 2010, en comparación con el récord de 146,7 millones en 2001- 2002, calcula el Departamento de Agricultura de Estados Unidos.
La producción de alimentos tendrá que aumentar un 70% en los próximos cuarenta años conforme la población mundial crezca a 9.100 millones en 2050 desde 6.800 millones en la actualidad, calcula la FAO. En siete países del África subsahariana, la región más propensa del mundo a la hambruna, el ingreso per cápita bajará el año próximo, según la ONU, lo que producirá un incremento en los niveles de hambre, que la organización calcula que padecen 1.020 millones de personas.


