Y por ello, el mercado retomó antiguos bríos.
Y así los precios repuntaron pese a las estimaciones más razonables. Inesperados, pero sumamente provechosos para quienes no se habían decidido a vender antes, sobre todo en lo que respecta al disponible, estos bríos descolocaron a los operadores.
Así todo, la cosa parece ser de corta duración, pues pocas dudas caben sobre la próxima cosecha: será muy buena.
Respecto al maíz, el cultivo norteamericano está en excelente estado. Hay cerca de un millón más de hectáreas de maíz sembradas sobre lo calculado originalmente.
Todavía, la posibilidad de heladas puede afectar al maíz. Y, por supuesto, a la soja. Pero cada vez parece más difícil que tal escenario se haga realidad.
Donde sí hay algún grado de probabilidad de heladas es en la parte norte del área, pues allí la soja recién alcanza su madurez en la segunda semana de octubre.
La cuestión es que en poco tiempo más, dejaremos una etapa caracterizada por la falta de soja. Con un stock mundial muy cercano a cero vamos a entrar en un cuadro de holgura.
Entendemos que esta reflexión es vital para prever lo que se viene en materia de precios. Por supuesto, por el lado de la oferta.
Si la demanda tienda a fortalecerse aún más, es posible que el efecto a la baja en los precios quede, en buena parte, neutralizado.
Pero, en fin, todavía falta un poco para la gran oferta norteamericana. Así las cosas, la demanda tiene dificultades para hallar una adecuada oferta. Hoy por hoy, la encuentra -con problemas- en EE.UU.
Esto explica el interesante ritmo exportador de este país. El total de compromisos, es decir exportaciones acumuladas más ventas pendientes de carga es casi un 90% superior a lo que pasaba el año pasado.
La casi totalidad de lo exportado últimamente por este país tiene por destino a China.
El gobierno de EE.UU. acaba de imponer restricciones a las importaciones de neumáticos procedentes de China.
En tal caso, sería lógico que este país tomase represalias con sus importaciones provenientes de EE.UU. Y de hecho ya lo hizo. Han quedado afectados algunos productos. Pero es difícil que tome medidas con la soja y sus derivados, pues no tiene alternativas de compra, en otras partes.
Ahora bien, una vez que esté la cosecha del MERCOSUR lista, podría adoptar alguna medida restrictiva respecto a la soja norteamericana. Estamos imaginando. Y en este ejercicio, la verdad es que existe tal posibilidad que favorecería a Sudamérica.
Mientras tanto, el mercado debería tender a la baja. Los precios sujetos a todo tipo de rumores podrían quebrar el piso de $900 y, probablemente, superarlo en otros días.
Serán días muy sensibles a cualquier comentario, y así los fondos acentuarán los procesos tanto a la suba como a la baja.


