En estos momentos el actor principal del sector productivo es el feed lot. Los establecimientos de engorde a corral están comprando casi toda la invernada que sale a venta. La gran seca que se da en todas las regiones productivas ha frenado la demanda de terneros por parte de los invernadores de campo. La falta de competencia entre los de campo y los de corral y la gran baja en el precio del gordo han generado un derrumbe de los precios de la invernada. Hoy las terneras se pagan alrededor de $2,90 mientras que los machos rondan los $3.
Para un criador, haber llegado a esta altura del año con los terneros en el campo y venderlos a estos valores, representa un quebranto importante. A esto hay que sumarle los problemas que debe enfrentar por la falta de pasto y reservas para encarar el invierno. La primavera seca impidió hacer reservas y el otoño seco no genero rebrote de pasturas ni crecimiento de verdeos. Para peor, las alternativas de compra de granos o subproductos para alimentación de las vacas son prohibitivos.
La mayoría de los productores ajustan carga, vendiendo vacas vacías y vacas cut preñadas. Las vacías se venden entre $1,20 a $1,30 el kilo y las cut preñadas entre $550 y $600.

Por ahora se mantiene alta la oferta de hacienda para faena debido a la seca y a que los feed lot ya empezaron a vender las camadas de terneros encerradas en la primera quincena de enero. Esto sumado a un consumo interno planchado y una exportación poco activa ha provocado el derrumbe de los precios.
En estos momentos el novillo pesado trazado es el de mejor colocación, ya que hay que embarcar lo que queda de hilton para que llegue a Europa antes del 30 de junio. Hubo un reparto extra de toneladas hacia plantas exportadoras del porcentaje que le correspondía a grupos que no llegaron a cumplir su parte de cuota en los términos previstos.

La vaca trazada casi no tiene colocación a menos que sea vaca nueva de excelente conformación, mientras que hay una alta demanda de vacas manufactura y conserva para embarcar a Rusia.

A pesar de lo que esta pasando en estos días, surgen informes y análisis muy serios que indican que a partir de septiembre de este año comenzara a faltar carne y que en el 2010 no se podrá mantener niveles de consumo mayores a 55 k por habitante con una exportación de 450000 TN. Esto indicaría que llego al punto de inflexión donde la demanda será mayor que la oferta con un gran faltante de novillos pesados.

Hasta acá estamos hablando de mercado. Una oferta desalentada por las políticas del gobierno de los últimos años y una demanda que se comió todo lo que había, también por la política del gobierno. El lema era: “comernos hasta la ultima vaca”, sin pensar en el futuro. El tema es que ese futuro se acelero y es a este gobierno al que le toca enfrentar el desastre que generaro. Ojala pudieran admitirlo, pero uno los escucha y resulta que el problema fue la expansión de la frontera agrícola y no los cierres de exportaciones, control de mercado, precios máximos, peso de faena, subsidios para pocos, etc...

Si fuéramos un país normal, diríamos que es el momento de la ganadería y que es el momento de invertir fuerte en una actividad con futuro. Lamentablemente estamos en Argentina y no sabemos como reaccionara el gobierno ante un faltante de carne.
¿Cerraran las exportaciones? ¿Estatizaran el comercio de carnes? ¿Obligaran a los criadores a mandar sus terneros a feed lots estatales vendiendo a un precio fijo?

Estamos muy cerca de “modelos productivos” que tienen una lógica muy difícil de entender.

Solo las elecciones, dependiendo de los resultados, podrían poner un poco de racionalidad a la actividad ganadera y al futuro del país.

Por Juan Llauro - Agrositio.com