Durante el primer semestre del 2022 las exportaciones agroalimentarias mexicanas aceleraron el paso al crecer 14.6% de forma interanual a 25,956 millones de dólares, ritmo que supera el avance de 10.8% que tuvieron durante los primeros seis meses del 2021, de acuerdo con datos del Banco de México (Banxico).

Al interior del indicador, el renglón más dinámico es el de las exportaciones de alimentos industrializados, que creció 20.6% (versus 16.8% en el 2021), esto es, más que el doble que el alza del valor de los envíos de productos agropecuarios, que fue de 8% (versus 4.8% en el 2021).

Por segundo año consecutivo, la facturación externa de los productos industrializados creció más rápido que la de productos primarios, con lo que la participación de los productos transformados en el valor total de las exportaciones agroalimentarias pasó de 49.6% a 55% entre el 2020 y el 2022.

La cerveza de malta repitió como el producto que más divisas le deja al país con ventas externas por 2,923 millones de dólares, cifra 9.5% mayor a la del primer semestre del 2021.

Apenas esta semana, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció su intención de dar un giro en la política gubernamental hacia esta industria, pues dijo que su gobierno ya no dará facilidades para que la producción de la bebida se expanda en los estados del norte del país –donde existe una producción importante–, al argumentar que en virtud de la escasez de agua en el norte del país se le dará preferencia a la distribución del vital líquido para consumo humano.

Detrás de la cerveza de malta, el tequila y el mezcal se consolidaron como la segunda exportación agroalimentaria del país en términos de valor con un espectacular avance de 48.1% a 2,145 millones de dólares, lo que hizo este renglón, además, como el más dinámico del top 10 de productos exportados.

Completan el top cinco de alimentos más vendidos por México en el exterior el aguacate, con una facturación externa de 1,761 millones de dólares (+13.4%), el tomate, que generó 1,351 millones de dólares (+0.2%) y las fresas y frambuesas, con 1,185 millones de dólares (+6.2 por ciento).

Otros productos industrializados dentro del top 10 de exportaciones y con crecimientos por arriba del promedio fueron los productos de panadería, con ventas por 1,019 millones de dólares (+25.5%), el azúcar, con 698 millones de dólares (+46%) y los artículos de confitería sin cacao, con 573,271 millones de billetes verdes (+34.7 por ciento).

Importaciones no se rezagan

Las importaciones alimentarias, por su parte, crecieron 19.6% a 21,198 millones de dólares, con lo que redujeron su ritmo en comparación con el alza de 34.1% registrada durante la primera mitad del 2021.

A su interior, el crecimiento fue equilibrado, pues las de productos agropecuarios crecieron 19.7% y las de productos industrializados subieron 19.4 por ciento.

El producto más importado por México siguió siendo el maíz amarillo, con compras que subieron 10.8% a 2,792 millones de dólares. A este le siguió la soya, con compras que subieron 21.8% a 2,147 millones de dólares.

Completan el top 5 el trigo, con adquisiciones que sumaron 1,100 millones de dólares (+40.3%), la carne de cerdo, con 1,086 millones de dólares (+12.2%) y la carne de ave, con 849 millones de dólares (16.3% más).

Por octavo año consecutivo, México registró un superávit en la balanza agroalimentaria. Durante la primera mitad del año este ascendió a 4,757 millones de dólares, cifra 3.4% inferior a la del mismo período del 2021.