BASF presenta en el mercado argentino un nuevo fungicida biológico con una amplia recomendación de uso para frutas y hortalizas, que en principio está disponible en el país para frutillas y frambuesas. Serifel® marca el ingreso de la compañía en el segmento de biológicos y viene a complementar su oferta integral de soluciones para los desafíos del productor agrícola.

Este nuevo fungicida biológico preventivo, de alta pureza, que pronto estará indicado para el control enfermedades de vid, tomate, cítricos, arándanos y otras frutas, es el de mayor concentración del mercado. Cuenta con un perfil toxicológico y ambiental positivo, tiene múltiples modos de acción y permite una aplicación más flexible, ya que puede realizarse en cualquier momento del ciclo del cultivo y hasta en la cosecha, colaborando con una mayor producción de frutas y hortalizas sanas.

Serifel® se trata de una nueva tecnología que forma parte del portfolio de soluciones para la agricultura de BASF y se puede usar en alternancia con otros fungicidas, contribuyendo al manejo integrado y eficiente de enfermedades. Otra característica relevante de Serifel® es que también es adecuado para la producción de alimentos orgánicos.

Serifel® ofrece a los productores una herramienta versátil para gestionar y minimizar los niveles de residuos, manteniendo al mismo tiempo altos estándares de control de enfermedades, sin comprometer el rendimiento o la calidad de los cultivos. También es una solución ideal para utilizar en la gestión de resistencia a los fungicidas tradicionales, y así prolongar su eficiencia y vida útil.

Serifel® es un producto exento de Límites Máximos de Residuos (LMR), por lo tanto, puede usarse en áreas sensibles, en sistemas de cultivo donde hay abejas polinizadoras y en programas de Manejo Integrado de Plagas (MIP). Además, no tiene ningún riesgo para el aplicador ni requiere condiciones especiales para su almacenamiento.

Modo de acción

Con una mayor concentración de agentes biológicos, Serifel® está formulado a partir de la bacteria Bacillus amyloliquefaciens,cepa MBI 600

Es altamente eficiente en el control de hongos y bacterias debido a sus múltiples modos de acción:

- Producción de metabolitos antimicóticos: crea daño físico de las membranas celulares patógeno.

- Exclusión física: excluyendo bacterias y hongos patógenos del espacio.

- Competencia de nutrientes: excluyendo bacterias y hongos patógenos de los alimentos.

- Activación de los mecanismos de defensa de las plantas

Como parte de sus metas hacia 2030 para impulsar una agricultura cada vez más sustentable, BASF esta comprometida a aumentar en un 7% anual su oferta de soluciones que contribuyan significativamente en ese logro. En esta línea, la novedad de este nuevo fungicida biológico apunta a la gestión sostenible de recursos, con una visión a largo plazo del sistema productivo. "Las soluciones biológicas son herramientas fundamentales para mejorar la eficiencia de los programas de control, combatir la resistencia, y contribuir a una gestión sostenible de recursos en el tiempo", explica Ruben Mancifesta, Gerente Comercial de Frutas y Hortalizas de BASF.

Los metabolitos producidos por Serifel® forman un "escudo" en la superficie de las plantas, evitando la colonización de enfermedades importantes como Botrytis cinerea en frutillas y frambuesas. "El sistema de producción de frutas y hortalizas es muy importante en Argentina. Con las necesidades de los productores en mente, desarrollamos una tecnología como la de Serifel®, que colabora con el crecimiento de cultivos cada vez más productivos y sustentables", afirma Fernando Cardello, Gerente de Marketing Estratégico LASE.