La Dirección General de Servicios Ganaderos decidió eliminar la obligatoriedad de sangrar y vacunar contra brucelosis los bovinos que entran y salen de Paysandú, medida que se había adoptado en 2018, ante el incremento de los focos de la enfermedad en ese departamento.

En ese entonces, la Comisión Departamental de Sanidad Animal (Codesa) pidió a las autoridades sanitarias del MGAP que tomaran esa decisión, que implicó mayores costos y generó algunas discusiones. Es que, por ejemplo, se vendía un ganado en un remate por pantalla y si los animales tenían por destino un predio de Paysandú, tenían que entrar con sangrado de libres de brucelosis y vacunados. La decisión adoptada por el MGAP disponía de la vacunación y revacunación obligatorias contra la brucelosis bovina con la vacuna Brucella Abortus RB51, a todas las hembras bovinas mayores de cuatro meses no gestantes, que se encontraban en predios ubicados en Paysandú, a partir del 1° de diciembre de 2018.

Las nuevas autoridades sanitarias del MGAP entienden que la medida ya estuvo vigente suficiente tiempo y tras reunirse con la Comisión Departamental de Salud Animal de Paysandú, decidieron levantarla. “Tuvimos una reunión muy buena con los integrantes de la Codesa el pasado jueves y luego, otra con el Centro Médico Veterinario, donde además, analizamos otras campañas sanitarias”, explicó a El País el director de los Servicios Ganaderos del MGAP, Diego de Freitas.

El jerarca recordó que la brucelosis bovina tiene en Uruguay una prevalencia muy baja que está entre 0,6% y 0,8%. “Todo el mundo dice que la campaña contra la brucelosis es un desastre y no se puede decir eso cuando hay una prevalencia baja. Es una campaña con sus costos y larga, porque es una enfermedad crónica, pero, insisto, tiene prevalencia baja”, dijo tajante de Freitas.

El levantamiento del sangrado y la vacunación para mover ganado hacia fuera y hacia dentro de Paysandú se basa en que en ese departamento, con la obligatoriedad vigente, el promedio de vacunación con la RB51 está entre 66% y 68% mientras el promedio en todo el país es de 20%. “Con la prevalencia que tenemos, con una vacuna de libre uso como la RB 51 que tiene un porcentaje promedio de 20% a nivel país y donde es obligatorio tenemos 66%, no amerita para nada seguir con esa medida. Es por eso que tomamos la decisión”, detalló el titular de los Servicios Ganaderos.

Mañana miércoles, tras la reunión de la Comisión Nacional Honoraria de Salud Animal (Conhasa), la Dirección General de Servicios Ganaderos emitirá la resolución suspendiendo la medida adoptada en 2018.

Mercados. Mientras tanto, se sigue trabajando silenciosamente en la apertura de nuevos mercados, así como en la renovación de los permisos de exportación en otros.

La más reciente incorporación fue Macao, región autónoma de China, que quedó abierta para carne bovina y ovina, con y sin hueso. De Freitas dijo que también se espera la confirmación de fecha para la auditoría de Egipto, para renovar la exportación de carne.