El Consejo Agroindustrial Argentino (CAA), integrado por 64 cámaras y entidades que representan a las economías del agro, forestal, pesca y sus industrias del país incluyendo bioenergías y fibras, llevó a cabo días atrás, en el salón de Operaciones de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, su primera reunión plenaria de forma presencial. También participó el Ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca Julián Domínguez y el Secretario de Política Tributaria, Roberto Arias. El titular de la cartera agropecuaria nacional resaltó que las políticas del sector tienen que ser consensuadas entre todos los actores.

AFAT trabaja en conjunto con todas las cámaras que integran el CCA con el objetivo de acordar una agenda común que permita delinear una “Estrategia de Reactivación Exportadora, Inclusiva, Sustentable y Federal” y alcanzar así los 100 mil millones de dólares en exportaciones y la creación de aproximadamente 700 mil empleos, en todo el país.

AFAT nuclea a 7 de las principales empresas de maquinaria agrícola y motores. Todas son fabricantes nacionales. Estas empresas representan el 75% del mercado de tractores; 99% de las cosechadoras y picadoras de forraje.

Reynaldo Postacchini, presidente de AFAT, afirmó que “si bien somos empresas de carácter internacional, cada día producimos en nuestras plantas ubicadas en Argentina, y poseemos una red de concesionarios que están distribuidos a lo largo y a lo ancho del país. Desde la Asociación creemos que, si dejamos la política de lado, todos podemos contribuir a generar un país mejor para nuestros hijos y nuestros nietos”.

“Desde AFAT venimos trabajando hace tiempo en propuestas relacionadas con incentivos a la producción nacional de bienes de capital, generación de empleo, promoción de la competitividad, modernización del parque de maquinaria, desarrollo de proveedores locales y financiamiento, entre otros”, subrayó el presidente. Por lo tanto, “coincidimos con el CAA en priorizar el fomento de políticas a favor de la producción, la generación de empleo en todas las provincias y una estrategia exportadora sostenible sin restricciones”.

Por último, aseguró que “es importante resaltar que una industria como esta, que provee de bienes de capital al sector que mayor incidencia tiene en el PBI, requiere de políticas industriales de largo plazo que incentiven las inversiones y colaboren en mejorar la competitividad de la producción nacional. Toda medida que en materia económica apunte a esto, siempre es bienvenida”.