TENDENCIAS CLIMÁTICAS

Si bien algunos indicadores de circulación atmosférica sobre el cinturón ecuatorial, aun mostraban cierta inercia del enfriamiento de las aguas superficiales que prevaleció durante el semestre cálido, las condiciones del indicador ENSO a esta altura del mes de mayo, ya han evolucionado hacia la neutralidad. De hecho, durante el mes de abril, hemos visto un importante despliegue de precipitaciones en áreas que se vieron afectadas negativamente por la presencia de La Niña durante la primavera pasada.


Este indicador de escala planetaria acoplo un perjudicial comportamiento regional durante febrero y parte de marzo, lo cual en conjunto generó un deficiente oferta de agua para el semestre cálido a nivel de la escala productiva del sudeste de Sudamérica, con zonas menos afectadas y otras más afectas, pero en general con períodos secos que impactaron sobre los rindes de los cultivos de verano.

La tendencia para lo que resta de mayo el desarrollo del trimestre frío según el consenso de los modelos de pronóstico, es a mantener el estado de neutralidad. Habrá que revisar la salida de estos algoritmos hacia el final del invierno, sin embargo, en principio, podemos decir que no hay una amenaza seria para las lluvias de primavera considerando las perspectivas del indicador ENSO.

Se observa una importante anomalía cálida frente a las costas bonaerenses, lo cual podría jugar como un efecto moderador del frío cuando la circulación se dé desde el sudeste. El aire frío proveniente más del sur o del sudoeste no puede presentarse más riguroso.

El rompimiento del bloqueo anticiclónico a mediados de marzo, favoreció el cambio en el patrón pluvial, el cual se sostuvo hasta esta reciente irrupción de aire frío. Las condiciones de circulación del mes de abril, resultaron típicas de transición estacional, incluso por momentos de verano. Esto mantuvo muy elevada la disponibilidad de humead en gran parte de la región pampeana e incluso sobre la Patagonia y Cuyo. Si bien las temperaturas absolutas no resultaron en valores record, como mencionamos, los desvíos de las temperaturas fueron muy significativos. Bajo estas circunstancias y con los frentes liberados a circular hacia el norte, convergieron factores básicos para el desarrollo de importantes sistemas precipitantes.

Esto ya se vio moderado en estos primeros días de mayo, con lluvias más débiles a gran escala, con eventos pluviales destacados en zonas más reducidas en general con tendencia a recostarse sobre el este. Es decir un comportamiento de precipitaciones más asociado a lo que se espera para esta altura del año.

Por lo pronto las lluvias del mes de mayo no se perfilan demasiado generosas. El secamiento del aire tras el último pasaje frontal, fue importante. El comienzo de la próxima semana presenta una nueva perturbación. Sin embargo, la falta de humedad solo permitirá que el avance de este frente se refleje en un aumento de la nubosidad y en todo caso un posterior fortalecimiento del ambiente frío Así ingresaríamos a una segunda quincena donde ya normalmente hay pocas chances de que la circulación del noreste se vuelva eficiente como para reposicionar aire de origen tropical. Consecuentemente podemos aspirar que en la segunda quincena aparezcan algunos eventos menores que permitan reacomodar reservas superficiales para mejorar las condiciones de siembra. Sin embargo no deberíamos sorprendernos que el recorrido de mayo sea negativo en cuanto a precipitaciones de gran escala.

La oscilación del vórtice polar (SAM-AAO), se encuentra en una fase positiva, es decir el vórtice se retrae sobre el continente antártico. Esto debería notarse en una menor irrupción de masas de aire frío rigurosas. Las condiciones actuales igual serán influyentes durante la próxima semana. Lo que debemos entender es que con una menor frecuencia de frentes y con entradas de humedad que se van recostando sobre el este, normalmente deberíamos observar un comportamiento pobre de precipitaciones.

Dadas estas circunstancias, entendemos que el escenario para el desarrollo de lo que resta de mayo y los primeros meses del invierno, resultarán en una típica distribución que deje la mejor oferta de agua sobre el este. Es decir, ya ha comenzado y se sostendría el típico gradiente pluvial de esta a oeste.

De acuerdo al diagnóstico climático del último período y al análisis de los principales indicadores de escala global y regional, proyectamos el siguiente comportamiento pluvial y térmico para el próximo bimestre:

1. El indicador ENSO (El Niño/La Niña) ya se encuentra en posición neutral. Por lo que puede analizarse a partir de las soluciones que arrojan los modelos actualmente, la neutralidad tiene altas chances de dominar todo el invierno e incluso mantener esa posición para el semestre cálido. Esto requiere validación a partir del mes de agosto.

2. En gran parte de la región pampeana la situación se perfila como para que se concrete una típica circulación de invierno. El mes de mayo tiene muchas señales para que mantenga lluvias modestas, salvando áreas reducidas principalmente recostadas sobre el este. Los episodios mencionados en ER, vecindades de SF, sur de Corrientes y Misiones, son un sesgo positivo que no se dio en otros sectores.

3. Para el resto de junio y julio, la situación puede presentarse algo más generosa, siempre que se den algunas irrupciones de aire húmedo. Entendemos que las siembras se verán favorecidas para avanzar según las fechas tradicionales de cada zona. El gradiente de lluvias este oeste, se manifestará con eficiencia, con lo cual las áreas del oeste con reservas escasas deberán medir bien el riesgo o desarrollar estrategias conservadoras para las siembras.

4. El NOA y el oeste del NEA, ya ingresan en estación seca o con fuerte reducción de precipitaciones, sin embargo la última parte de mayo, aun puede dejar algunas recargas para estas áreas productivas.

5. El centro norte de la Mesopotamia, ha recibido algo de precipitaciones, pero el contexto de fondo es de extrema complejidad para esta zona dado que está acoplada a lo que sucede en las áreas altas de la cuenca del Plata donde está lloviendo persistentemente por debajo de los valores normales.

6. Si bien estamos bajo la influencia de una importante masa de aire frío, las mismas han aparecido en forma muy tardía. Potencialmente esto es un indicador que puede asociarse a un invierno que no debería ser tan riguroso, lo cual no quita que volvamos a tener eventos fríos destacados. En promedio el recorrido del mes de mayo y los próximos dos meses se mantendrían cercanos a los valores normales o con desvíos positivos.