Todavía se vislumbra en el panorama económico-financiero mundial, factores que contribuyen a estimar precios internacionales relativamente sostenidos.

Veamos con mayor detenimiento.

Y ello, especialmente, para la soja y el maíz en vista del reducido nivel de stocks. Los mercados de commodities como la soja y el maíz, están sometidos a un balance de oferta y demanda más ajustado que en los años anteriores.

Este cuadro se observa en momentos en que la gente está más sensible a la contaminación y por ende, más propensa a la energía renovable, que procede de la materia prima agrícola.

Además, China continúa creciendo como demandante de todo tipo de alimentos.

Pero, este suave optimismo se da de bruces en la política monetaria y cambiaria argentina, que pretende frenar la empinada cuesta inflacionaria. Esta política apunta a mantener una tasa de devaluación de nuestra moneda por debajo de la inflación interna.

Obviamente, esto no es bueno para los precios locales.

A nivel global, la abundante liquidez, el miedo a una inflación ascendente, en EE.UU. y en el mundo en general, incentivan la compra de mercadería como la soja y el maíz y sus correspondientes derivados.

El fantasma de la inflación sin duda responde a la percepción de la gente tanto en EE.UU. como en el resto del mundo sobre la necesidad de los gobiernos para financiar el déficit fiscal incrementado por los programas para paliar la situación derivada de la pandemia.

El temor a un proceso inflacionario en EEUU (donde forman los precios de estos granos) desatado por la emisión creciente sigue acentuándose.

El gráfico nos muestra cómo a partir de junio del año pasado la inflación fue creciendo. Y con el gobierno de Biden, la suba se ha acentuado.

Tasa de inflación interanual de EE.UU. (Investing.com)


A fin de impulsar la economía norteamericana, la Reserva Federal (FED) mantendrá los tipos de interés sin cambios. Y se comprometió a mantener las tasas de referencia sin cambios en el rango de 0% a 0,25%. Así decidió ello, pocos días atrás.

Esta es una herramienta para incentivar la recuperación de la economía estadounidense, afectada por la pandemia.

Asimismo, este Organismo afirmó su compromiso de usar todo el instrumental disponible para respaldar la economía del país.

Mientras las tasas de interés de EE.UU. queden en un nivel tan bajo, es más probable que el dólar se mantenga depreciado.

En consecuencia, los commodities agrícolas tienen una mayor propensión a mantenerse en los actuales precios; sin que ello descarte una nueva mejora.

A su vez, los fondos frente a la posibilidad de mayor inflación siguen destinando parte de su masa monetaria a sus posiciones compradoras en los mercados de futuro. Señores: los fondos están requetecomprados.

El problema de este esquema es que frente a un cambio en el contexto puede modificarse rápidamente. Si llegara a producirse un cierre de posiciones colectivo, la corrección puede ser dramática.

¡Cuidado con ello!

Deberíamos estar muy conscientes de que la taba en algún momento puede darse vuelta. Aunque, por ahora, nada lo indique.