Sin embargo, los pronósticos no muestran eventos que permitan sustentar aquella recuperación. El efecto de las lluvias sin dudas ha sido positivo, pero el arranque de noviembre está mostrando la fortaleza de la onda de largo plazo que sigue poniendo su sello negativo en la oferta de agua. Habrá que transitar al menos diez días de noviembre para que se perfile una nueva situación húmeda, con lluvias generalizadas en la región pampeana y el norte del país.

La semana estará caracterizada por condiciones de tiempo estable durante gran parte del período sobre todo el territorio nacional.

El resto de la jornada de hoy, el tiempo continuará estable en todo el país, con el viento prevaleciendo del sector norte, con moderada intensidad, favoreciendo un importante incremento de las marcas térmicas, especialmente sobre el NOA, la región cuyana y el norte de la región patagónica. Sólo quedará un pequeño sector sobre el este de la provincia de Buenos Aires, con valores de temperatura levemente inferiores al resto del país, debido a la circulación del viento.

El martes, la situación será muy similar al lunes, con la circulación del viento bien marcada del sector norte, proporcionando un aumento de las marcas térmicas generalizado. Asimismo, se prevé que se incremente levemente la humedad en las capas bajas de la atmósfera, pero por el momento no generará ningún tipo de inestabilidad sobre el territorio nacional. La única diferencia significativa con el día lunes, es la intensidad del viento, que se prevé que sea más importante, incluso con ráfagas fuertes en toda la franja central del país, incluido el sudoeste de Buenos Aires y el noreste patagónico.

El miércoles, se espera que comience a avanzar un sistema frontal frío por la franja norte de la región patagónica, provocando un aumento de la inestabilidad sobre la provincia de Río Negro y el extremo sudoeste de la provincia de Buenos Aires, esto fomentará un progresivo incremento de la cobertura nubosa en esa región. Mientras tanto, el resto del país mantendrá condiciones de tiempo totalmente estables, con cielo mayormente despejado y viento norte, lo que mantendrá las temperaturas muy elevadas en todo el centro y norte del país.

El jueves, el sistema frontal frío comenzará a avanzar por el sur de la Pampa y sudoeste de Buenos Aires, lo que podría generar algunas lluvias y tormentas muy puntuales y aisladas, que se extenderían al este de Río Negro. Estos eventos podrían ser de moderada intensidad, especialmente acotada a áreas pequeñas, ya que, a nivel general, no serían de magnitud importante. El centro de alta presión ya se espera que se desplace hacia el este, abandonando el territorio nacional, por lo que la circulación del viento cambiará y comenzará a prevalecer sobre el sector oeste.

El viernes, el sistema frontal frío se desplazará levemente hacia el noreste, lo que provocará que las condiciones de inestabilidad abarquen gran parte del centro del país, pero las precipitaciones serían muy aisladas y de escasos acumulados, salvo alguna tormenta puntual. El área que podría tener las principales precipitaciones se acotaría al este de la provincia de Buenos Aires, aunque igualmente los fenómenos serían aislados.

Para el fin de semana, se prevé que comience a ingresar una perturbación desde el oeste, con un ingreso de humedad importante, lo que podría provocar el desarrollo de lluvias y tormentas de variada intensidad sobre la región cuyana y parte del sudoeste de Córdoba, especialmente durante la jornada del domingo, momento en el cual se podrían potenciar los desarrollos sobre Mendoza y San Luis.