La importancia de registrar datos a campo es un aspecto poco valorado en la ganadería argentina, sobre todo en la cría. Aún entre los que poseen rodeos con pariciones estacionadas es difícil encontrar la cantidad de terneros nacidos por quincena o semana. Esto permitiría ver la importancia de cambiar la distribución de las pariciones para contar con más terneros cabeza y menos cola, es decir poner el foco en aquéllos que nacen antes y, por lo tanto, son más pesados al destete. Una estrategia que no sólo facilita el manejo sino que también mejora el negocio.

Con esta visión, dos jóvenes profesionales que están haciendo un perfeccionamiento en el estudio Elizalde & Riffel, analizaron los pesos al destete de los terneros del establecimiento El Cautivo, ubicado en Daireaux, Buenos Aires. Se trata de un planteo mixto de ciclo completo, donde la cría se realiza sobre campos bajos sembrados con agropiro alargado, la recría sobre pasturas base alfalfa y verdeos de invierno con suplementación invernal de silaje de maíz, y la terminación a corral utiliza ración seca a base de maíz.

El productor viene tomando los pesos individuales de los terneros destetados desde 2014, momento en que empezó a adelantar y acortar los servicios, sobre un rodeo de cría ordenado y con vientres de buen estado corporal. Los resultados se presentan en el siguiente cuadro, que incluye sólo los años pares a fin de agilizar la lectura.


El peso de destete promedio de los terneros aumentó a través de los años, alcanzando un 28% más en 2020 comparado con 2014. Además, el desvío con respecto a la media, así como el coeficiente de variación, tendieron a disminuir a lo largo del período. Esto es importante dado que implica tener terneros más parejos en cuanto a peso, lo cual hace a un manejo uniforme y eficaz.


Estas curvas permiten observar el aumento del peso medio de destete desde 2014 hasta 2020. Otra cuestión que resalta es que en 2014 la curva es más plana y alargada debido a la mayor dispersión en los pesos de destete, mientras en 2020 es más alta y más estrecha coincidiendo con un menor desvío. En concreto, el desvío estándar en 2014 es más del doble que en 2020.

Pariciones, antes y todas juntas

La mejora progresiva de los pesos al destete, así como la reducción de su variación a través de los años, se debe a una confluencia de variables. El aumento de la proporción de terneros nacidos más temprano permite que sean más pesados al destete, lo cual impacta en los pesos promedio. A su vez, reducir el período de servicio lleva a concentrar los nacimientos, lo cual se traduce en una menor dispersión de pesos al destete, siempre que las lactancias no generen grandes diferencias en las ganancias de peso. Esto sobresale en 2020, cuando la mayoría de los individuos están mucho más cerca del peso medio.

La importancia de disminuir la variabilidad de los pesos al destete se puede evaluar mejor comparando las distribuciones de los datos originales versus una simulación donde el desvío estándar se reduce a la mitad.


Tal como se ve en el gráfico, todas las curvas punteadas se concentran, es decir se estrechan en la base y se hacen más altas. Esta disminución de la variación se traduce en terneros más parejos, bajando la proporción de terneros cola, algo muy importante para la gestión de la empresa ganadera.

El manejo detrás de los datos

Hay tecnologías disponibles que ayudan a concentrar las pariciones al inicio del período. La inseminación artificial a tiempo fijo (IATF) de todo o parte del rodeo, permite obtener porcentajes de preñez de alrededor del 50%, es decir que la mitad de los nacimientos podría ocurrir el primer día de la parición. Otra herramienta interesante es la sincronización del celo antes del servicio natural, también de todo o parte del rodeo.

A la vez, más allá de la buena alimentación, hay varias alternativas para aumentar los pesos promedio al destete. Adelantar el período de servicio, reducir ese período manteniendo la fecha de inicio del mismo y concentrar la fecha promedio de los partos hacia el inicio de la parición, como resultado de los dos puntos anteriores, son opciones a tener en cuenta.

En plata

Para comprender mejor el impacto económico de lograr mayor cantidad de kilos mediante este tipo de prácticas, se simuló un aumento de los kilos promedio al destete a lo largo de la serie en una unidad del desvío estándar de cada año. Esto se combinó con la reducción del desvío estándar al 50% (considerado en la simulación anterior) y se comparó con el análisis original de los datos de El Cautivo. Los precios de referencia se tomaron del sitio www.entresurcosycorrales.com, actualizados al 14 de agosto último.


El aumento de los pesos al destete junto con la disminución en la dispersión modifica sustancialmente el ingreso por la venta de los terneros. Los años con mayores dispersiones y menores pesos promedios al destete lograron diferenciales mayores (2014 y 2016 respecto de 2020).

En síntesis

Un aumento en los kilos promedio destetados junto a la concentración de los pesos al destete impacta en el margen de la actividad. Tal como ocurrió en el caso El Cautivo, esta mejora se vería magnificada en situaciones o en años donde los pesos al destete son bajos y dispersos.

El adelantar el servicio, siempre que la base forrajera lo permita, y achicar su duración, implica más nacimientos al inicio de la parición, con lo cual se obtienen terneros más pesados y más parejos. En definitiva, esto permite incrementar el resultado económico de la actividad a través de una mayor cantidad de kilos vendidos. El primer paso para lograrlo es llevar registros.

Por: Ing. Agr. Conrado Caniggia - Ing. Agr. Agustín Casiello - Ing. Agr., M. Sci. Sebastián Riffel - Ing. Agr.,M.Sci., Ph.D. Juan Elizalde
Fuente: Valor Carne