Durante 2019, el sector que presentó la mayor tasa de crecimiento fue el agropecuario. Así lo señala el último informe sobre la coyuntura económica elaborado por la Fundación Milenio.

El estudio destaca que este crecimiento se debe “al mayor dinamismo mostrado por la producción de artículos agrícolas, industriales y pecuarios”.

“La industria manufacturera; por su parte, presentó una tasa de crecimiento del 3,2%, impulsada por el crecimiento de los sectores de alimentos procesados y otras manufacturas”, señala el documento.

Por otro lado, Milenio indica que el sector servicios en su conjunto creció en 3,4%.

“Como en el caso de los otros sectores de la economía, todos los referidos a servicios mostraron en 2019 tasas más bajas de crecimiento que las observadas en 2018”, sostiene el estudio de Milenio.

Entonces, se asegura que los sectores de servicios financieros, servicios empresariales, restaurantes y hoteles fueron los que mostraron un mayor dinamismo.

Sobre los sectores que más aportan al Producto Interno Bruto, el estudio refleja que “las actividades agropecuarias, han aumentado su participación en similar periodo, pasando del 11,6% en 2017 al 12,2% en 2019”.

También aumentó la participación de los servicios en el PIB, del 44,3% en 2017 al 46,2% en 2019.

“Se observa que la economía se encuentra atravesando una coyuntura en la que están perdiendo peso las actividades exportadoras extractivas, y están cobrando mayor peso las actividades de servicios y agropecuaria. Las demás actividades han mantenido su peso en el PIB relativamente estable”, sostienen.

Sector agrícola

El documento dice que los productos oleaginosos e industriales, como soya y caña de azúcar, representan el 65% de la producción agrícola del país.

En total, abarcan el 45% de la superficie sembrada en Bolivia. En la gestión pasada presentaron un aumento del 4,4% en la producción física total.

Mientras que la superficie sembrada creció en 5,3%, no obstante, los rendimientos promedio de estos cultivos cayeron en casi 1%.

Los cereales, que incluyen el maíz, arroz, sorgo en grano y trigo, y representan un 15% de la producción física agrícola del país y un 37% de la superficie sembrada, cayeron (-10,9%).

Milenio destaca que, en 2020, con la irrupción de la pandemia del Covid-19, el valor exportado de la soya entre enero y mayo de este año es del -10,6%, nuevamente debido a la caída combinada de precios y volúmenes exportados. “Es muy probable que esta tendencia se mantenga en lo que va del año, debido a que la economía mundial y regional continuará experimentando los efectos de la pandemia”, advierte.

Pero la organización señala que el sector seguirá siendo vital, dado que las exportaciones mineras y de hidrocarburos han experimentado una caída a consecuencia de los menores precios y volúmenes de exportación.