Los principales responsables fueron la caída en el rendimiento promedio provincial, que disminuyó un 12%, y los menores precios a cosecha. Esto llevó a un resultado económico negativo de USD -0,5/ha, USD 37/ha por debajo del ciclo anterior. De haberse mantenido los mismos derechos de exportación de la campaña previa, la tasa de rentabilidad hubiese sido del 6,2%. Por otro lado, el planteo de trigo con soja de segunda experimentó un mejor resultado que la soja de primera a nivel provincial, y se observó más lucrativo en 7 de los 17 departamentos analizados.

El presente informe tiene por objetivo mostrar los resultados económicos para el productor de soja de la provincia de Córdoba para la campaña 2019/20. Al analizar la tasa de rentabilidad de la actividad, que sirve como comparación del rubro ante otras actividades, se observa una tasa promedio de -0,1% para la provincia de Córdoba, representando una caída de 7 puntos básicos a comparación de la campaña anterior. El resultado económico que se desprende de este análisis se encontró en el terreno negativo de los USD -0,5 por hectárea, USD 37 menos que el ciclo previo.

Resultad económicos de la soja de primera para un campo promedio de Córdoba

Fuente: BCCBA en base a datos propios, Revista Márgenes Agropecuarios y BCR.

Uno de los principales factores que explican la reducción en la rentabilidad es el menor rendimiento promedio de la oleaginosa, que se ubicó en 33,6 quintales por hectáreas para Córdoba, representando una caída de 4,4 qq/ha en relación a la campaña 2018/19. Por otro lado, el precio a cosecha deprimió más el ingreso de los productores, al ubicarse en un nivel inferior al de mayo de 2019. El valor de la soja fue de USD 214,6 la tonelada, implicando un recorte de USD 2,3/tn. Este precio fue afectado por la modificación en los derechos de exportación que se incrementaron hasta el 33%. De haberse mantenido el mismo derecho de exportación de mayo de 2019, el precio observado habría sido cercano a USD 235/tn, llevando a un resultado económico positivo de USD 31,4/ha y una tasa de rentabilidad del 6,2%.

Por otro lado, si bien los costos indirectos disminuyeron 8%, esto se debe casi exclusivamente a la caída en el precio de la oleaginosa, y no a una reducción de costos reales. El arrendamiento, principal componente del costo indirecto, presentó un incremento en cantidad de quintales de soja por hectárea, pasando de un costo promedio de 10,7 qq/ha en la campaña 2018/19 a un valor de 11,1 qq/ha.
En lo que respecta a los costos directos, los mismos presentaron una disminución del 4%, debido principalmente a la reducción en el costo de cosecha. En cuanto a los gastos comerciales, se observó una caída del 2%, alcanzando un valor de USD 142/ha. Si bien los servicios de paritaria, secado y zarandeo incrementaron su valor respecto a la campaña previa, la reducción en el costo del flete (USD -1,2/tn) llevó a una caída en los gastos de comercialización totales.

Con respecto al planteo combinado de trigo y soja de segunda, los resultados se han mostrado positivos para el promedio departamental, pero menores a los de la campaña previa. La tasa de rentabilidad se ubicó en 5,7%, con una caída de 4 puntos básicos. El resultado económico fue de USD 30,3 por hectárea, representando un recorte de USD 28/ha.

Margen bruto de trigo + soja de 2° para un campo promedio de Córdoba

Fuente: BCCBA en base a datos propios, Revista Márgenes Agropecuarios y BCR.

Para el caso de este planteo, los ingresos totales de la actividad se vieron afectados por eventos contrapuestos. Por un lado, el rendimiento promedio del trigo fue de 30 quintales por hectárea para la provincia, un 16% mayor al de la campaña previa. Aun así, el precio del cereal disminuyó en USD 29,6/tn, lo que representó una caída del 15% que anuló gran parte de los mejores rindes. Por otro lado, la soja de segunda obtuvo tanto un rendimiento promedio menor al de la campaña previa (28,8 qq/ha vs 33,2 qq/ha) como un precio inferior, resultando en una merma del 9% para los ingresos totales.

En lo referente a los costos directos, disminuyeron un 6% con respecto a la campaña anterior, principalmente debido a la caída en el precio de la urea y el fosfato. Un 29% de la reducción total de los costos directos se dio en la soja de segunda, y el otro 71% en el trigo. Contrariamente, los costos de comercialización observaron un incremento del 4% con respecto a la campaña anterior, como consecuencia de la suba de los servicios de paritaria, secado y zarandeo. Los fletes incrementaron levemente para ambos cultivos, en USD 0,5 por tonelada transportada.

El efecto final sobre el margen bruto ha sido una caída del 19% con respecto a la campaña 2018/19, alcanzando el valor de USD 400/ha. La reducción en los costos indirectos, debido al efecto del menor precio de la soja en el costo de los arrendamientos, no alcanzó a compensar este detrimento, y el resultado operativo cayó en USD 64 por hectárea, pero manteniéndose positivo.

El gráfico siguiente muestra las combinaciones de rendimientos de indiferencia para el trigo y la soja de segunda, es decir, rendimientos que harían que el margen bruto sea igual a cero. Cualquier combinación de rendimientos por encima de la línea amarilla de puntos dará como resultado un margen bruto positivo, mientras que cualquier combinación por debajo de la línea resultará en un margen bruto negativo. Como puede apreciarse, los rendimientos obtenidos en la campaña 2019/20 se encuentran muy por arriba de la “línea de indiferencia”, con rendimientos de 30 qq/ha para el trigo y 28,8 qq/ha para la soja.

Rendimiento de indiferencia para el planteo combinado -Trigo + soja de 2ª

Fuente: BCCBA en base a datos propios, Revista Márgenes Agropecuarios y BCR.

La provincia de Córdoba presenta una amplia variabilidad en lo que respecta a calidad de suelos, distancia al principal puerto de exportación y condiciones agrometeorológicas, por lo que la rentabilidad difiere entre zonas. Para la campaña 2019/20 el resultado económico para soja de primera osciló entre USD -97 y USD 54 por hectárea. Los departamentos con mejores resultados fueron San Justo (USD 54/ha), Tulumba (USD 43/ha) y Marcos Juarez (USD 32/tn). Los departamentos del este de la provincia se benefician de suelos más fértiles y una menor distancia al puerto de Rosario, lo que se traduce en menores costos por flete, mientras que los departamentos del norte y el oeste de la provincia presentan menores costos en el alquiler de la tierra. Por otro lado, los menores resultados se encontraron en Santa Maria (USD -97/ha), Río Cuarto (USD -89/ha) y Calamuchita (USD -87/ha), derivados principalmente de un rendimiento de soja que se ubicó, en promedio, en 28,3 qq/ha, 26,3 qq/ha y 27,4 qq/ha respectivamente. Dentro de los 17 departamentos analizados, 7 de ellos presentaron rentabilidad negativa.

Con respecto al planteo combinado, los mejores resultados se encontraron en la zona este de la provincia, con Marcos Juárez liderando la escala (USD 121/ha), seguido por San Justo (USD 59/ha) y Unión (USD 48/ha). Por otro lado, los departamentos del oeste provincial han sufrido bajos rendimientos tanto de trigo como de soja de segunda, y es por ello que se observaron rentabilidades negativas en varios departamentos, entre los que destacan Santa María (USD -191/ha), Río Cuarto (USD -188/ha), Calamuchita (USD -164/ha) y Río Segundo (USD -103/ha). En la campaña 2019/20, se observaron resultados negativos en 8 de los 17 departamentos analizados para el planteo combinado.

Fuente: Bolsa de Cereales de Córdoba