El presidente de la Federación de Industrias Frigoríficas Regionales Argentinas, Daniel Urcía, estimó que “el consumo interno creció entre 4 y 5 kilos por habitante durante la cuarentena”.

De cualquier modo, advirtió que “en abril la faena vacuna sumó 1,2 millón de animales y eso generó ciertas expectativas, pero nuestro análisis indica que en realidad cayó 5% respecto de los meses previos”.

Urcía explicó que el aumento de consumo “se basa en el precio competitivo que tiene la carne vacuna respecto al resto de los productos alimenticios”.

“El volumen ayudó a reducir costos y sirvió para amortiguar los efectos del Coronavirus pero el escenario a futuro es absolutamente incierto. El valor de recupero de faena ha caído estrepitosamente, un cuero que representa un costo de disposición, pérdida de valor de menudencia, sebo y hueso, conllevan a que el matarife tenga que pagar por el servicio de faena y a que la industria también tenga mayores costos productivos” concluyó.

Fuente: AgroNoa