En los mercados del mundo se vio una marcada debilidad del dólar, que comienza a ceder contra todas las monedas del mundo, debido a la emisión tremenda de la Reserva Federal, pero en Argentina el mercado de cambios estuvo partido en dos. Por un lado, la Comisión Nacional de Valores obligó a que la operaciones en dólar MEP y contado con liquidación tengan más días de parking (papeles estacionados durante cinco días) por lo que esos canales se operaron muy poco, y el flujo voló hacia el blue y hacia transacciones con otras vías, como criptomonedas.

De esa manera, en el exterior el dólar cedió 3,4% en Brasil, 2,3% en México, 1,4% contra la libra, 0,7% contra el euro, 0,2% en Chile y 0,1% contra el yen. En Argentina se vio un mayor cepo al CCL y el MEP, pero el blue volvió a apuntar claramente hacia arriba. El dólar turista subió 4 centavos hasta 91,79 pesos. El dólar oficial subió 3 centavos hasta $70,61, el blue saltó $3, hasta $129, el mayorista subió 9 centavos hasta $68,27, y lo más riesgoso del caso es que el BCRA volvió a perder muchas reservas: ayer se fueron otros US$ 99 millones, y ahora le quedan US$ 42.642 millones, por lo que en 130 días Reconquista 266 perdió US$ 2.844 millones, con el país en default, sin pagar absolutamente nada de deuda.

Los mayores controles hicieron que el dólar MEP cayera $3,21hasta $106,32 y el contado con liquidación bajó $3,28 hasta $110,64. Por lo que la brecha entre el dólar oficial y el blue saltó hasta el 82,7% y la brecha entre el CCL y el mayorista bajó hasta el 62%. Pero otras monedas estuvieron firmes: medidos en pesos, el euro subió 60 centavos hasta
74,92, el real subió 46 centavos hasta 12,7 y la libra subió 18 centavos hasta 84,13.

La tasa de interés de los plazos fijos (26,6% anual) sigue desalentando esas colocaciones y, en consecuencia, el Ministerio de Economía logró captar ayer $18.043 millones en concepto de letras con vencimientos en 2020 y un bono con vencimiento en 2022. De acuerdo a lo informado en el comunicado oficial, se adjudicaron 208 de las 209 órdenes de compra que se recibieron. La mayor parte de la deuda se concentró en un Bono ajustado por el Coeficiente de Estabilización de Referencia (Boncer) con vencimiento en 2022 y una tasa adicional anual del 2,25% por sobre la inflación del período. El monto adjudicado en este título ascendió a los $8.162 millones, lo cual representó el 45% del total. Y en segunda instancia, se colocaron dos Letras a Descuento (Ledes) con vencimientos en agosto y septiembre de este año, respectivamente. Por la primera se consiguió $6.396 millones a una tasa anual del 29,75% mientras que por la segunda lo obtenido sumó apenas $478 millones a una tasa del 30,34%. Paralelamente, también se licitó una Letra ajustada por CER (Lecer) con vencimiento en octubre de 2020, por la cual se consiguieron $3.006 millones a una tasa del 2% por sobre el coeficiente.

Este movimiento se da con el juego de póquer de la reestructuración en plena marcha. En torno a los bonistas, se deslizó que Martín Guzmán está realizando una nueva oferta, con una mejora muy escasa respecto de la anterior.

Por esa razón, Fitch Ratings rebajó ayer la calificación de Argentina de C para RD (Restricted Default). En Tanto que S&P Global Ratings rebajó las notas de emisión de cuatro de los bonos argentinos en dólares a ‘D’ desde ‘CC’: los títulos AY24, BIRAD 2021, BIRAD 2026 y BIRAD 2046 a ‘D’ de ‘CC’.

A pesar de esta menor nota, los títulos argentinos tuvieron ayer una mejora en sus cotizaciones, pero este aumento debe ser tomado con la punta de los dedos, ya que por la condición del default, los papeles debieron cotizar en Nueva York en su posición flat, es decir computando en el contado los intereses corridos, por lo que los valores subieron respecto de lo negociado el viernes pasado.

Así, el 80% de lo operado en bonos se transó en siete papeles: AY24 31%, TX23X 12%, TJ20X 10%, TJ20 9%, TX24 7%, AO20 5% y TX23 4%. Y, con bajo volumen, los bonos argentinos subieron fuerte hasta su mejor nivel en once semanas, pero reiteramos por un factor técnico. En los extremos hubo saltos del 7% al 15% para los bonos PBA5C, PAA0D, PARAC, AC17C, PAY0, DICAC, DIA0D, AO20C y AA37D. Y bajas del 1% al 8,5% para los bonos A2E2, T2X1, DICYD y BPLD. Y, paradójicamente, a pesar del default, el riesgo país bajó 245 unidades, hasta 2.520 puntos básicos.

En base a avances en medicamentos contra el covid-19 y por la apertura de las cuarentenas, las bolsas del mundo resucitaron, gracias también a compras de oportunidad de varios fondos de inversión que empiezan a ver alguna luz en el fondo del túnel. El fondo soberano de Arabia Saudita, por ejemplo, decidió salir de compras, tomando posición en empresas que cayeron mucho con la crisis: entre las elegidas por los árabes estuvieron Shell, British Petroleum, Disney, Cruceros Carnival, Boeing y Hoteles Marriot, entre otras.

Con esto, hubo subas superiores al 3% en las bolsas europeas y alzas del 0,1% al 2,2% en los índices de la Bolsa de Nueva York, con el Nasdaq más tranquilo, ya que si se supera el virus todas las empresas de Internet perderán parte de la ventaja que tuvieron en este período. Mientras que la Bolsa de San Pablo bajó 0,2% y la de México subió 1%.

La Bolsa de Buenos Aires no tuvo el impulso de las bolsas del norte. El 80% de lo operado en acciones locales se transó en Comercial del Plata, Galicia, Grupo Valores, Carboclor, Supervielle, Boldt, Pampa E y TGN. Y, con $1.002 millones negociados, subió apenas 0,2%. En los extremos se vio un salto del 22% para Rosenbusch y subas del 3% al 8% para Domec,TGN, Rigolleau, Hipotecario, YPF, Molinos, Loma Negra, Polledo y Cuyana. Con una caída del 9% para Dycasa y bajas del 2% al 3,4% para Morixe, Comercial del Plata, Central Puerto, Metrogas Y Banco Río – Pref. Mientras que los ADR argentinos que cotizan en Nueva York estuvieron mixtos, con subas del 1 al 6,6% para Bunge, Ternium, YPF, Globant, Telecomm y Edenor y bajas del 1% al 3,4% para Pampa E e IRSA I.

En las commodities, la distensión continuó. Hubo suba del 2,4% para el petróleo: WTI a US$ 34 y Brent a US$ 36. Los metales preciosos actuaron débiles: la onza de plata cedió 0,5% y el oro bajó 1,4%. Los metales básicos firmes: el aluminio subió 1,3%, el cobre mejoró 1,2% y el níquel ganó 0,7%. En Chicago hubo suba del 1,7% para la soja, alza del 0,5% para el maíz y baja del 0,3% para el trigo. En Rosario se observó una suba del 3,3% para la soja, alza del 1,2% para el girasol, baja del 1,7% para el maíz y desplome del 8,7% para el trigo, con una grave denuncia de CRA, donde se anunció que hubo quema de uno de los campos, ex profeso. Y finalmente se anotó una caída del 3,9% para el bitcoin, con bajas menores para el resto de las criptomonedas.

Más deflación en Brasil

En Brasil, el Indice de Precios al Consumidor Amplio -15 registró una caída de 0,59% en mayo mientras que en abril el retroceso había sido de 0,01%. Se trata de la menor variación para un mes desde el lanzamiento del Plan Real en 1994. En el año, el IPCA-15 acumula una suba de 0,35% y de 1,96% en los últimos doce meses. El índice se elaboró sobre la base del comportamiento de los precios entre el 15 de abril y el 14 de mayo y suele anticipar el dato de la inflación que tendrá este mes. La tendencia deflacionista es clara en un contexto de caída del consumo y de la actividad y la meta de inflación del Banco Central para este año que es de 4% con un margen de tolerancia en más o en menos de 1,5 punto porcentual. Al igual que en índices anteriores, y como está ocurriendo en los demás países, el rubro que más subió (uno de los dos que lo hizo) fue el de Alimentos y Bebidas mientras que el mayor retroceso se observó en Transporte.

Fuente: El Economista