La publicación de tres informes del USDA le dio a las últimas jornadas, después de varios días de calma, un vuelo especial.

¿A qué nos referimos? Al reporte de Oferta y Demanda Mundial (WASDE), al informe de Siembra de Trigo de Invierno y al informe de Stocks Trimestrales.

El WASDE mostró niveles de stock finales para EE.UU. superiores a lo esperado por el mercado. Y, por el contrario, reveló menores stocks de maíz, al 1° de diciembre, que lo aguardado. Obviamente, tal estimación hizo de trampolín para los precios en Chicago.

La producción de soja para EE.UU. se estimó en 96,8 millones de toneladas. Hace un mes se calculaba 96,6 millones.

En lo referente al mundo, el organismo estimó que las existencias finales a diciembre serán de 88,5 millones de toneladas. Este volumen es de varios millones menos que el de la campaña anterior, pero de 2 millones más de lo aguardado

Respecto a la soja para nuestro país, vale recordar que, a la fecha, cerca del 30% de la producción estimada ya está comprometida. Es mucho. El año pasado para la misma fecha tal proporción estaba por debajo del 10%.

Como todos se darán cuenta, el porcentaje subió tanto frente a la posibilidad que advertía el tenedor de soja de aumento de retenciones antes del 10 de diciembre pasado.

Quiere decir que ha bajado la porción del volumen disponible a partir de la próxima cosecha.

Ello debería incentiva la mejora de precios en el mercado local. Es una posibilidad considerable.

Ya estamos muy cerca del acuerdo que firmarían EE.UU. y China.

China había dejado de importar soja estadounidense a lo largo de disputa comercial. En busca de mercadería de otra procedencia, aumentó sus importaciones de Brasil, comprando alrededor del 80% de la cosecha del país 2019.

En caso de concretarse el acuerdo, los precios en Chicago deberían incrementarse. Más aún si consideramos el resultado publicado por el WASDE que estima una cosecha de soja en EE.UU. inferior a 100 millones de toneladas en 2019/20.

No es cualquier cosa. Se trata de una baja del 20% aproximadamente respecto a la campaña anterior.

A partir de la firma del acuerdo, habrá ganadores y perdedores. Como ganador, está EE.UU. Sin duda.

¿Y cuál será el perdedor? Claramente, Brasil. El acuerdo operará como presión a la baja sobre los precios de la soja de Brasil y, en menor medida, de la Argentina.

Según el USDA, Brasil tendrá un cosecha récord (2019/2002), de 123.5 millones de toneladas. Un millón y medio más que en la del año pasado.

De acuerdo a la CONAB, la cosecha de este país llegará 121,1 millones de toneladas, por encima de las 115 millones de la campaña pasada.