Con el único objetivo de evitar otro salto del tipo de cambio, el Banco Central tomó la decisión de mantener la tasa de referencia de las Leliq por las nubes, es decir en los actuales niveles de 85,7%. Pero la gran pregunta que se hacen los inversores en estos días es si realmente tiene sentido pagar semejantes rendimientos cuando al mismo tiempo rige el control de cambios, que básicamente le prohíbe a las empresas utilizar pesos para atesorar dólares.

“Si tuviste que poner controles para comprar dólares, por lo menos dale un alivio a las PYME y aprovechá para bajar las tasas”, le dijo a Infobae el titular de una sociedad de Bolsa. Éste es el comentario que se escucha de manera recurriente en el mercado financiero en estos días. La mayoría considera que el titular del Central, Guido Sandleris, está sobreactuando con rendimiento que supera en por lo menos 30 puntos la inflación esperada.

Ayer Mauricio Macri reconoció ante los empresarios convocados por AEA que el objetivo de las medidas adoptados en esta etapa es evitar que se acelere la suba del dólar. Claramente los controles cambiarios apuntaron a esa dirección. Pero las tasas en niveles estratosféricos podrían estar indicado que tampoco fue suficiente con dejar afuera del mercado cambiario a las empresas que demandan divisas con fines de atesoramiento.

Por otra parte también está aumentando la expectativa de inflación luego de la última devaluación. La encuesta que realizó el BCRA entre analistas a través del Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) arrojó que se espera que la inflación este año salte al 55%. Esto justificaría tasas en pesos más altas para ganarle al incremento de precios, pero de todas formas lucen como rendimientos exagerados.

Ante las nuevas subas rendimientos en las Leliq, la mayoría de los bancos también aumentó la tasa que paga a los ahorristas. El Nación, por ejemplo, la subió al 62% y la mayoría ya está pagando niveles cercanos al 60%. Allí entra a jugar otro factor. Se calcula que el nivel de atesoramiento de individuos supera los USD 1.000 millones por mes, teniendo en cuenta la restricción de 10.000 dólares mensuales por persona. Para tratar de reducir ese monto de dolarización o al menos que no aumente, la única opción sería remunerarlos con tasas cada vez más altas.

Miguel Zielonka, economista de Econviews, señaló que “la tasa del 85% era para que los bancos paguen mejor a los ahorristas y frenen la dolarización de portafolios. En el contexto actual, pagar ese rendimiento por las Leliq no tiene sentido”. En el mismo sentido, señaló que “el atesoramiento será necesariamente menor ahora y además va a entrar la oferta de los exportadores. Ahí el Central se va a correr de la intervención”. Ayer el BCRA volvió a intervenir para evitar cualquier tipo de movimiento del dólar, que se mantiene en niveles de $56 en el mercado mayorista.

Se calcula que los exportadores deberían ingresar al mercado alrededor de USD 10.000 millones por los dólares que mantenían en cuentas del exterior. El decreto que establece los controles cambiarios le dio 5 días hábiles para hacerlo, aunque por ahora no se nota una llegada masiva de divisas ni mucho menos.

La decisión de los bancos de rescatar Leliq para asegurarse liquidez implicó que la meta monetaria se alejara del objetivo que se había estipulado con el FMI. El propio Sandleris reconoció que la situación será discutida con el organismo internacional, porque no se cumplirá con el objetivo de “crecimiento cero” de la base monetaria para la meta trimestral estipulada para septiembre.

Fuente: Rosario Finanzas