Por supuesto que los mercados internacionales, con Chicago a la cabeza, tienen una gravitante incidencia en los precios de los granos. Sin duda.

De hecho, Chicago viene mostrando una suave alza dada, fundamentalmente, por la incertidumbre que mantiene la producción sobre las precipitaciones en el Medio Oeste estadounidense. Es que los cultivos –maíz y soja- requieren con urgencia mayores niveles de humedad, para desarrollarse con productividad aceptable.

Si bien se registraron precipitaciones recientemente sobre el noreste de la zona núcleo, que aliviaron el problema, en general, no hay suficiente humedad. Los productores aguardan con ansiedad que ocurran lluvias en abundancia.

También, influye en los precios la publicación del USDA, a darse el lunes que viene, con la actualización de las superficies sembradas y con las proyecciones productivas 2019/2020.

Pero en un país, como el nuestro, sujeto a todo tipo de vaivenes provenientes de su débil institucionalidad, las cuestiones internas pueden pesar más que las externas.

Estos días están marcados por los factores internos.

A horas de las elecciones primarias argentinas (PASO), el ambiente de negocios va ingresando en un clima candente. Y el dólar es el termómetro que indica cómo resulta este proceso.

Estas elecciones definen los candidatos presidenciales. Pero esto no es lo realmente importante, o al menos, lo más preocupante. Lo que gravita en el clima de negocios es el resultado de éstas, que funcionarán como una suerte de encuesta de opinión, antes de la votación general del 27 de octubre.

La depreciación del peso posee un condimento político. Por ello es previsible que haya nuevos saltos. La intensidad de éstos será según sea el resultado de estas elecciones.

Si el candidato Fernández alcanzare una ventaja muy visible, los mercados podrían caer en picada. Y el peso, también. Es decir que el dólar subiría.

En suma: para el caso de que Fernández logre un margen menor a algo así como 7 puntos porcentuales, el Banco Central continuaría su actual política a través altas tasas de interés reales. En consecuencia, no habría mayores sobresaltos sobre el dólar.

Pero si la diferencia a favor del candidato K es muy visible, es probable que la especulación domine la escena durante los siguientes días.

En tal caso, la posibilidad de que el dólar alcance niveles superiores al actual es muy alta y, en consecuencia, la soja debería subir prácticamente a la par.

El gráfico muestra cómo desde que comenzara la cuenta regresiva hacia las PASO, el dólar empezó a elevarse (desde 10/07)

Evolución del dólar en los últimos días

Línea verde: libre. Azul: Banco Nación. Gris: MAT

De hecho, el factor dólar ya incide, desde hace unos días. Hoy miércoles, en Rosario para la soja se vieron valores de $10.700 y, en algunos casos, por encima de este nivel.