Cerca de 100 familias viven en Santa Rosa del Apere, una pequeña comunidad a orillas del río Apere, a pocas horas de San Ignacio de Moxos (Beni). Muchos comunarios se dedican a la producción de cacao, cuyo producto fue nominado entre las 50 mejores muestras, en el premio internacional del Cacao, desarrollado en París este año.

El pasado 3 de abril se realizó una competencia nacional en la ciudad de La Paz, donde clasificaron seis mejores muestras de grano de cacao para representar a Bolivia en el Premio Internacional del Cacao en París (International Cocoa Awards 2019). La muestra de San Ignacio de Moxos corresponde a Abraham Noza Mosúa, productor de la Comunidad de Santa Rosa del Apere, afiliado a la Asociación Agroforestal Indígena de la Amazonía Sur (Aaias), y la muestra de Huacaraje pertenece a la empresa Emmoní.

“De las cuatro muestras que llevamos a La Paz, dos se enviaron a París. Ahora nos llega la buena noticia de que estamos en primer lugar, uno de los mejores somos nosotros, los bolivianos, el Beni especialmente”, declaró Bernardo Ichú, presidente de la Aaias.

Ichú, también productor oriundo de la provincia Cercado del Beni, cultiva cacao desde hace 10 años en su chaco.

La nominación es el resultado de un proceso riguroso por miembros del Comité Técnico CoEx 2019, quienes realizaron la evaluación de las muestras de grano de cacao procesadas en licor, valorando los atributos aromáticos y la calidad global de las muestra de cacao. Los productores de las 50 mejores muestras y el Premio Internacional del Cacao serán celebrados en el Salón del Chocolate (Salon du Chocolat) en París del 30 de octubre al 3 de noviembre del presente año.

Apoyo institucional

La Aaias cuenta con una decena de miembros e incluso una fabrica de tratamiento de Cacao, que funciona en las temporadas altas y fue construida con el apoyo del Centro de Investigación y Promoción del Campesinado (Cipca).

“Estamos convencidos que la inversión de esfuerzo en el manejo de bosque con cacao silvestre e implementación de Sistemas Agroforestales con esta misma genética, aunado al conocimiento y aplicación de buenas prácticas durante la cosecha y poscosecha tienen recompensa en la calidad del cacao, valorada por expertos catadores”, declaró Alejandra Anzaldo, presidenta de Cipca Beni.