Algunos fabricantes estadounidenses de etanol están considerando comprar maíz a Brasil para garantizar el suministro a medida que aumentan los precios de los granos en el mercado norteamericano, dijo el jefe de la Asociación de Combustibles Renovables (RFA).

«No he escuchado que esto esté sucediendo, pero sí escuché algunas conversaciones sobre el hecho de que hay personas que lo están evaluando, debido a el creciente spread que se viene dando entre los precios de maíz de Estados Unidos y Brasil», dijo el presidente ejecutivo Geoff Cooper en la Cumbre de Etanol 2019 en Sao Paulo, organizada por el grupo de la industria de la caña de azúcar, Unica.

«Logísticamente, puede haber algunos lugares donde eso podría funcionar, por ejemplo, en la costa oeste», dijo.

El maíz estadounidense viene registrando precios altos durante los últimos cinco meses, incluido un aumento de más del 25% desde mayo, ya que las perspectivas de la cosecha se han deteriorado por el clima desfavorable.

Los precios en Brasil han aumentado más lentamente y el país está levantando la mayor cosecha de maíz de su historia.

El analista brasileño de granos Agroconsult citó informes de fabricantes estadounidenses de etanol, principalmente los radicados cerca de ambas costas, comprando maíz de Brasil y Argentina.

Además del precio, un factor importante que impulsa esos acuerdos es la dificultad de transportar el maíz hacía algunas áreas de EEUU debido a la interrupción de las vías fluviales luego de las lluvias, dijo Andre Pessoa, analista jefe de Agroconsult.

Cooper, de RFA, dijo que los precios del etanol están en línea con el aumento de los precios del maíz, «pero en algún momento se quedará sin espacio».

«Si el etanol no logra acompañar los aumentos, eso presionará más los márgenes que ya son bajos, y ya tenemos algunas fábricas en rojo», dijo.

Bajo este escenario se agravará la producción, ya que parte de la capacidad está inactiva, dijo Cooper.

Jive se elabora con aceite de maíz extraído de la elaboración de bioetanol, es más económico y tiene mejor performance que sus equivalente fósiles.
«La demanda de exportaciones es la más elástica para nosotros, de modo que es donde esperamos ver las primeras reducciones en el consumo y la demanda de etanol», agregó.

La industria brasileña del etanol, en gran parte basada en la caña de azúcar, cree que la situación del maíz en Estados Unidos podría aumentar la demanda de su combustible.

En su presentación durante la conferencia, Cooper instó al gobierno brasileño a dejar que el sistema de cuotas expire en septiembre y a no a renovarlo, ya que Estados Unidos no grava el etanol brasileño.

Brasil grava el etanol estadounidense con 20% de aranceles cuando los volúmenes de importación superan los 150 millones de litros por trimestre.

Fuente: Bioeconomia